Fue hace cuatro meses cuando Idamia del Rosario Baro Villegas desapareció en la comuna de Coihueco. La mujer de 35 años que tenía 8 meses de embarazo, fue vista por última vez saliendo de su casa la madrugada del domingo 8 de julio.

El pasado martes, se realizó un intenso operativo de búsqueda en el Río Cato, donde un testigo clave aseguró haberla visto el día de su desaparición. El fiscal jefe de Chillán, Pablo Fritz explicó al diario La Discusión, que deberán esperarse a que baje el caudal para poder seguir el rastreo.

Si bien, en un principio su familia descartó la teoría de un suicidio, tras el procedimiento que no tuvo resultados, se mostraron más resignados ante ese escenario. “Sabemos que es muy difícil (que esté viva) por el tiempo que ha pasado y porque ella estaba embarazada”, señaló Adriana Baro, hermana de la mujer, al sitio local.

“La verdad es que a estas alturas, hasta el mismo hecho de encontrar su cuerpo ya sería un descanso para nosotros, en especial para nuestra mamá”, añadió Baro, quien entregó un dato que fortalecería la tesis de un suicidio.

Según explicó Baro, Idamia necesitaba remedios para la epilepsia y hace 8 meses que no se los estaba tomando. “Eso le producía cambios de humor repentinos y casi siempre andaba enojada o hacía cosas raras. Además, ella era muy reservada con su vida, nunca contaba lo que le pasaba, así que de verdad no sabemos qué pudo haberle pasado esta vez”, reveló.

Sin duda, este nuevo antecedente podría dar luces del complejo momento por el que Idamia estaba atravesando. Aún así, su madre aseguró que en el último tiempo ella estaba contenta porque iba a nacer su bebé y la había visto muy tranquila.