Una mesera que editó un video para hacer que sonara como si un policía quisiera violarla, fue encarcelada hace algunos días en Inglaterra.
Georgia Harris, de 19 años, alteró la grabación para chantajear a un funcionario policial, pidiéndole a cambio cerca de 250 libras esterlinas, es decir, unos 206 mil pesos chilenos.
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La mesera de un club nocturno grabó una conversación que sostuvo con el oficial en su auto, acerca de un “hipotético” ataque sexual. Tras esto, ella cortó el video y le envió solo un fragmento, donde se escuchaba a él diciendo: “Te podría violar“, y a ella respondiendo: “No quiero que me violes“.
El tribunal escuchó como Harris, oriunda de la zona de Essex, lo amenazó con ir a la policía con la grabación, si el policía de 22 años no le pagaba lo que pedía.
El oficial entró en pánico, pero decidió hablarlo con sus colegas y jefes antes de reportar la amenaza a la Policía de Kent, condado donde él reside.
Harris, quien vive con su madre en Chelmsford, fue arrestada y luego le envió una carta de disculpas al funcionario, donde se leía: “No estaba en mis cabales. Después de todo, ¿quién le envía una amenaza así a un oficial de policía?”
Harris, quien actualmente tiene 20 años, admitió que envió esa amenaza y fue sentenciada a ocho meses en un centro de detención juvenil. Además, su defensa explicó que la joven no bebería más alcohol y que también buscaría ayuda psicológica.
En tanto, el oficial señaló estar ‘extremadamente preocupado’ pues siente que esta situación lo ha hecho darse cuenta que también puede ser vulnerable.
