Este jueves un menor de 12 años y un sujeto de 20 fueron detenidos luego de que robaran un camión repartidor de abarrotes, con el que atropellaron a 5 personas y dieron muerte a un peatón. Lo más grave del asunto es que el niño era quien conducía el vehículo.
La noticia fue cubierta por diversos medios nacionales, lo que generó que gran parte de la población comentara sobre el preadolescente que recibió un impacto de bala para que detuviera su incesante carrera que dañó gran parte de una feria libre en Puente Alto.
El padre del menor involucrado en el delito, Manuel, hace un mea culpa de lo sucedido y pide perdón a las familias afectadas por el robo y luego masivo atropello que protagonizó su hijo. Sin embargo, según comentó al diario LUN, el niño de 12 años sufre de problemas neuropsiquiátricos que lo hacen actuar sin que nada le importe.
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“Él sufre de un enlentecimiento frontotemporal derecho, lo que se traduce en un severo trastorno en su conducta social”, explica el preocupado padre. En otras palabras, “es como si pensara como un niño más chico. Eso hace que no le tenga miedo a nada. No mide consecuencias”.
Como si fuera poco, la adicción a las drogas que tiene el menor lo hacen vivir en constante ansiedad. Esto lo motiva a querer escapar de su casa, la cual está completamente enrejada para evitar su huída.
Manuel se encuentra desesperado, ya no sabe qué hacer. A pesar de sus esfuerzos, asegura que su hijo se encuentra fuera de la realidad y sólo ayuda especializada puede ayudarlos. “Lo que necesito es ayuda médica urgente”, aseguró al medio nacional.
“En Chile no existe un lugar especializado para tratar a niños como mi hijo. Queremos que le den un tratamiento psiquiátrico en un centro adecuado para su edad. No queremos que se vaya al Sename, porque de ahí seguro que sale peor”, sentenció Manuel. “Perdón, perdón. Pedimos mil veces perdón a la familia del señor que mi hijo atropelló”, finaliza.
