Aminah Hart tenía 42 años, era soltera y había perdido dos hijos que llevaba en su vientre -debido a un desorden genético- cuando decidió tener un bebé a través de la fecundación in vitro. Gracias a esta técnica y la esperma de un donante anónimo logró traer al mundo a su única hija: una niña a la que llamó Leila.

“Le quita un poco el romance, no, cuando decides aceptar la esperma de un donante e intentar tener un bebé. No iba a ser una postal hacerlo sola, pero fui criada por una increíble madre soltera y ella me enseñó que podía hacerlo”, relató Aminah al medio australiano ABC.

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Cuando tuvo que decidir quien sería el padre biológico de su hija sólo le entregaron tres opciones en tres hojas de papel, detallando estadísticas vitales, cualidades físicas, historial médico y pasatiempos. Fue así como escogió al donante de nombre Scott: un criador de ganado que había sido entrenador de fútbol, padre de cuatro hijos y que se describía como feliz y saludable”.

Fue una decisión sabia, ya que sus genes sortearon el problema de Aminah y un año después, ya tenía en sus brazos a una bella niña de cabellos dorados.

Aminah Hart | Facebook
Aminah Hart | Facebook

Y aquí viene lo inédito: Si bien las donaciones de esperma suelen ser anónimas, un giro en su propia vida la hizo sentir curiosa sobre el padre biológico de Leila y decidió buscarlo en el registro de donantes voluntarios. Scott Andersen había dado consentimiento para que lo contactaran cuando la niña cumpliera 18, por lo que lo agarró por sorpresa que le llegara un mail tan pronto.

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Cuando este divorciado padre de cuatro niños recibió el mensaje de Aminah “no sabía qué pensar, no parecía real”, declaró, pero aceptó reunirse con la mujer.

La reunión resultó bien y este hombre decidió convertirse en un padre involucrado en la vida de su niña. El constante contacto los unió poco a poco, lo que llevó a que Scott terminara una relación que tenía en ese entonces. Después de eso, Cupido hizo su pega y desde hace 12 meses que son pareja.

“Tener el hijo de un donante como el último hermano de esta familia es un giro muy moderno, ¿no?”, dice Aminah en broma.