Conoce las nocivas consecuencias psicológicas que puede generar el abuso de redes sociales

La presencia en redes sociales parece tomar más importancia día a día: si no publicas tus vacaciones o la última bebida caliente que pediste en tu café favorito… parece como si jamás hubiese ocurrido. Ser visible en el mundo virtual se ha vuelto sinónimo de existir y tener una vida feliz.

Pero nada más alejado de la realidad, no saber utilizar las redes sociales puede tener nocivas consecuencias para nuestra salud, sobre todo nuestra salud mental. Esto porque puede llevarnos a aparentar una vida “perfecta”, incluso a comportamientos obsesivos.

[lee-tambien]https://www.pagina7.cl/notas/tendencias-y-vida-sana/2019/05/06/rascarse-puede-volverse-una-adiccion-estudio-realizado-en-chile-lo-comprueba.shtml[/lee-tambien]

De acuerdo a la edición española de Revista Elle, Haztúa Psicología Positiva advierte que los riesgos por el abuso de las redes sociales son muchos y variadas las razones que nos llevan a ese comportamiento adictivo: aparentar felicidad, bienestar, buena compañía o mostrar nuestra “mejor cara” y con ello aumentar la autoestima, y el ego.

“Problemas como la ansiedad o la depresión pueden manifestarse cuando existe una mala interpretación de la vida virtual en las redes. Somos presos de los ‘me gusta’, fotos compartidas y comentarios (buenos y no tan buenos), siendo todo ello influyente en determinadas áreas de nuestra vida como nuestra autoestima, metas personales, inconformismo asociado a que nunca nos sea suficiente o que pocas cosas nos hagan felices en plenitud”, señaló el psicólogo Pedro Martínez Arias, de Haztúa Psicología Positiva.

Actualmente, las personas pasan más de dos horas al día navegando por Internet, debido principalmente a que es posible hacerlo desde cualquier parte con un teléfono celular. Si bien esto nos mantiene a un click de distancia de nuestros amigos y seres queridos, paradójicamente también fomenta el aislamiento social.

El subir la mejor foto se ha convertido en una forma de distorsionar la realidad. Además, los expertos hacen hincapié en que nadie visibiliza “sus momentos de debilidad, de estrés, situaciones difíciles o momentos tristes, no porque no los tengan sino porque no los muestran”.

Por ello, muchas veces es necesario tomarse un respiro de la tecnología y buscar la conexión con nuestro entorno, y con nosotros mismos. “Comparte momentos, no publicaciones”, aconsejan los expertos.

Consecuencias psicológicas

• Adicción al “conectado constantemente”: lo que genera ansiedad por no estarlo.
• Aislamiento: dejar de ver personas o no prestar atención cuando estamos compartiendo con otros por estar mirando el celular.
• Vacío emocional: relaciones sociales más vacías emocionalmente.
• Falta de criterio personal: seguir las tendencias y perder la autenticidad, así como la intimidad.
• Aumento de problemas: depresión, ansiedad, insomnio o inseguridad, preocupación desmedida por la imagen corporal o lo que piensan los demás, ciberacoso, entre otros.