La conmovedora historia de padre e hija que se disfrazan para sacar la basura: videos son virales
El 17 de marzo, Jaime salió a botar la basura con un llamativo disfraz de Olaf, de la película Frozen, todo en medio de la cuarentena producto de la pandemia por coronavirus. No sabía el impacto que tendría.
“La idea surgió cuando íbamos a guardar el disfraz de carnaval de Olaf. En vez de hacerlo, me dio por ponérmelo. Al verme, Mara (su hija) quiso vestirse de Elsa. Es su princesa favorita. Pasamos todo el día jugando con los disfraces y al llegar la hora de tirar la basura, nada me pareció mejor que hacerlo vestido”, dijo sobre aquella vez, que fue la primera, pero no la última.
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A partir de ahí, el hombre, que hoy es furor en redes sociales, ha ido variando sus trajes, cautivando a sus vecinos y a los usuarios de Internet. Un día es el Joker, otro un pirata y al siguiente Spiderman. Los trajes son varios y la imaginación es grande.
“Viendo que los vecinos se animaban y les gustaba la idea, seguimos haciéndolo con los disfraces que tenía guardados de los anteriores carnavales o con ropa deportiva, como el traje de taekwondo o el de snowboard”, manifestó el hombre al Huffington Post.
No obstante, fue el 26 de abril cuando la pequeña Mara se unió a los viajes al contenedor de basura que realizaba su padre, luego que las autoridades permitieran la salida de los niños durante el confinamiento. Ella pidió unirse al plan inmediatamente.
“Al contarle que podía salir, dijo que quería ir con papá a tirar la basura. Por eso y porque en redes estaba la gente pidiendo que volviera, decidimos hacer una semana de salidas conjuntas”, añade Jaime, que no había salido desde el 13 de abril. Esta personificó a un atracador de La Casa de Papel.
A partir de ahí no pararon. “Pasamos a hacerlos con manualidades, así nos divertíamos y además Mara aprendía cosas que le vendrán bien para el colegio”, dijo el papá, quien explicó que no tiene una empresa de disfraces, como muchos creyeron.
“Sólo nos gusta disfrazarnos”, comentó Jaime, quien fue padre 10 días antes de que comenzara el estado de alarma en España.
