Horrible: turista murió durante viaje en México y su cuerpo fue retornado casi sin órganos

Salir del país natal para conocer las bondades de otro, siempre tiene algunos riesgos, pero un terrible caso quedó al descubierto luego que la ciudadana inglesa Elaine Hines (65), denunciara el fallecimiento de su hija Amanda en México.

La mujer de 41 años murió en el Distrito Federal en noviembre de 2017, pero su cuerpo fue retornado un mes después a su país de origen, donde levantó una serie de suspicacias al ser analizado por los especialistas, ya que descubrieron que no tenía casi ningún órgano.

[lee-tambien]https://www.pagina7.cl/notas/actualidad/nacional/2018/12/12/muerte-de-nina-en-chillan-remece-en-caso-sename-medico-estaria-involucrado-con-el-deceso.shtml[/lee-tambien]

Esta situación generó una serie de teorías a las que Hines aún no encuentra respuestas. Al menos así lo dio a entender al medio británico The Mirror, donde expresó que cree que los órganos de su primogénita fueron vendidos en el mercado negro del país azteca.

“Ella vino a casa vacía. Se robaron todo dentro de ella. Si esto le ha ocurrido a Amanda, ¿a cuántas otras personas le ha pasado y volverán a hacerlo? Creemos que sus órganos fueron robados y vendidos”, declaró, sospechas a las que se suman la falta de antecedentes de parte de los organismos mexicanos involucrados en el proceso. El único que dio una respuesta fue el Hospital de Cos, donde precisaron que el cuerpo fue enviado a la policía con todas sus partes para una autopsia.

Amanda Gill | Facebook

“Cuando ella murió, llamaron a la embajada británica y luego a la policía. Ellos vinieron por el cuerpo. Tomaron aproximadamente tres horas para recogerlo. También se llevaron todo lo que ella tenía, su ropa, su teléfono y se dio aviso al fiscal. Ella todavía tenía todos sus órganos cuando se fue de aquí. Su cuerpo fue sellado en una bolsa y guardado en una habitación refrigerada”, indicaron desde el recinto de salud en un comunicado.

Consultada sobre lo ocurrido, la policía prefirió no referirse al caso de esta turista que falleció tras una descompensación en la capital, presumiblemente por la diabetes, enfermedad que fue confirmada por su madre.

En tanto la familia de Amanda ya aceptó su pérdida, por lo que sus restos fueron cremados en febrero. “Es desgarrador, la cosa más horrible. Era una niña encantadora, muy espiritual”, concluyó su madre.