No es un misterio que uno de los alimentos preferidos a la hora del picoteo es el maní. Están los salados, endulzados y los que su sabor no ha sido intervenido.

Sin embargo, a pesar de ser una comida saludable y que aporta variadas vitaminas a nuestro organismo, lo cierto es que hay que tener cuidado con las cantidades.

Así lo sostuvo Daniela Gómez, académica disciplinar de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Las Américas. La especialista indicó que “el maní contiene alto contenido calórico y de lípidos o grasas de buena calidad, pero no se considera un alimento de libre consumo y la cantidad a consumir va a depender de los requerimientos nutricionales individuales de cada persona”.

En ese sentido, indica que la cantidad sugerida es de 30 gramos diarios para la población general. “Su consumo en mayor cantidad en un día específico no se traduce en aumento o disminución de peso corporal”, añadió.

Agregó que lo que sí se debe considerar “es un equilibrio en nuestra alimentación diaria que incluya proteínas, carbohidratos y lípidos de preferencia mono y poliinsaturados, en los que podemos incluir el maní diariamente o ir variando según gustos y preferencias”.

En cuanto a las propiedades que posee este alimento, la experta indicó que “el maní pertenece al grupo de las legumbres, pero por su composición nutricional se clasifica como un fruto seco”.

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Siguiendo esa misma línea, señala que “tiene alto contenido de grasas o lípidos, principalmente ácidos grasos mono y  polinsaturados. Al ser un alimento de origen vegetal, no contiene colesterol, aporta proteínas,  carbohidratos y fibra dietética en menor cantidad, además de vitaminas y minerales como calcio, tiamina y niacina, además de fitoesteroles que ayudan a disminuir el colesterol de la dieta, por lo que tiene un alto potencial nutritivo y económico para la seguridad alimentaria”.

Si bien la mayoría de las personas incorpora el maní en los picoteos o como una colación entremedio de las comidas, lo cierto es que hay variadas formas de agregarlo a la alimentación diaria.

“Al igual que todos los alimentos, el maní se puede incorporar en la alimentación diaria, su consumo no debe limitarse a una hora en específico, sino que podemos incluirlo en desayuno como acompañamiento del pan en mantequilla de maní, como snack a media mañana entero, en preparaciones dulces, aliño de ensaladas en reemplazo de aceite, etc”, precisó Gómez.

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En relación a las porciones adecuadas, la nutricionista explica que “al igual que todos los alimentos, el maní se puede incorporar en la alimentación diaria considerando los requerimientos nutricionales individuales, gustos y preferencias de cada uno, no es considerado un alimento de libre consumo, la porción sugerida son 30 gramos aprox, (20 a 30 unidades diarias)”.

Contraindicaciones del Maní

Una de las principales contraindicaciones de consumir maní, según precisa la experta, es que esta legumbre es considerada uno de los principales alimentos que puede ocasionar alergias alimentarias.

Lo anterior, “debido a que contiene nueve alérgenos en su composición, lo que se puede traducir en síntomas leves a graves que pueden ocasionar la muerte si no se trata oportunamente, razón por la que es de suma importancia identificarlos sobre todo en niños”.

De hecho, informa que los síntomas aparecen “desde segundos hasta dos horas posterior a la ingesta. La cantidad de maní necesaria para inducir una respuesta alérgica es muy pequeña (100 a 1000 miligramos) e incluso algunos pacientes pueden reaccionar frente a la exposición vía cutánea o inhalatoria. Como referencia, un grano de maní contiene aproximadamente 200 mg de proteína”, finalizó.

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