Sigue la búsqueda de Lucía: esposa de profesor que murió mientras paseaba a su perrita pide ayuda

Sociedad
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Una tragedia sacudió a Argentina cuando Estela Medina sobrevivió a una brutal agresión por parte de su esposo, Hugo Zelaya, de 72 años, quien intentó atacarla sexualmente y la golpeó hasta dejarla gravemente herida. En un acto heroico, la madre de Estela, Rosa Andrada, de 104 años y con demencia senil, se interpuso para proteger a su hija, resultando fatalmente golpeada por Zelaya. A pesar del horror, los vecinos ignoraron los gritos de ayuda de Estela. El agresor fue detenido pero beneficiado con arresto domiciliario, mientras que Estela vive con miedo y su madre fallecida en un acto valiente.
Desarrollado por Bío Bío Comunicaciones“Me salvó mi mamá”, dijo entre lágrimas Estela Medina, quien sobrevivió a una espantosa agresión por parte de su esposo gracias su madre, Rosa Andrada, de 104 años, quien murió tratando de defenderla.
El agresor es Hugo Zelaya, marido de Estela y de 72 años, está detenido con arresto domiciliario, un beneficio que recibió por su edad.
El ataque ocurrió el último viernes de junio en Argentina, cuando Zelaya intentó mantener relaciones sexuales con Estela.
Ante su negativa, estalló en violencia. “Me empezó a pegar y me hizo rodar por la cama hasta el borde”, contó la víctima. Tirada en el piso, recibió golpes en la cabeza con un bastón.
Estela intentó escapar, pero él la alcanzó y comenzó a morderla, relató. “Me arrancaba la piel, yo veía que tenía pedazos de piel mezclados con pelos entre los dientes y masticaba”, consigna el medio TN.
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En medio del horror, agarró un frasco de perfume e intentó romperlo para defenderse, pero fue un envase de Pervinox (un antiséptico para desinfectar heridas) el que terminó usando para lanzárselo a los ojos.
La intervención de la madre de Estela cambió el rumbo de los hechos. Aunque padecía demencia senil, Rosa se levantó de la cama y se interpuso entre su hija y el agresor.
“Hijo, déjala”, le suplicó. Pero Zelaya descargó su furia contra ella. La golpeó hasta matarla.
Estela logró huir y pedir ayuda. Sin embargo, sus gritos fueron ignorados por los vecinos, que no se atrevieron a intervenir. “Yo gritaba ‘nos están matando’, pero nadie quería entrar”, dijo.
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Finalmente, la policía reportó que la mujer de 104 años murió. Y aunque Zelaya fue detenido, la justicia lo benefició con prisión domiciliaria por tener más de 70 años.
Estela, por su parte, no puede volver a su casa, mientras que su agresor permanece en libertad sin custodia policial.