“Él es mi motivo”: Adriana Vacarezza valoró el apoyo de su hijo en compleja recuperación

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Una mujer embarazada en EE.UU, Adriana Smith, ha sido declarada con muerte cerebral y se mantiene conectada a un respirador por una ley antiaborto en Georgia que la obliga a dar a luz. Actualmente lleva 22 semanas de embarazo y su familia se pregunta sobre la salud del bebé. A pesar de estar muerta en términos cerebrales, la ley exige mantenerla con soporte vital hasta el nacimiento. Su familia busca apoyo mientras el hospital no revela cómo se está permitiendo que el feto siga creciendo en el cuerpo de la mujer.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesEn EE.UU, una mujer embarazada fue declarada con muerte cerebral. Sin embargo, desde hace tres meses, la mantienen conectada a un respirador con el fin de dar a luz a su hijo, por una ley antiaborto que la obliga.
Ella es Adriana Smith, una enfermera y madre de 30 años, que estaba embarazada de dos meses y sufrió muerte cerebral el 19 de febrero.
Los médicos señalaron que, por una estricta ley del estado de Georgia, se le exige que permanezca con soporte vital hasta que el feto esté listo para nacer.
Hasta el momento, la mujer lleva 22 semanas de embarazo, es decir, poco más de 5 meses.
La ley, que está vigente en los estados más conservadores de EE.UU, restringe el aborto una vez que se detectan latidos en el feto.
La madre de Smith afirmó que esto ha dejado a su familia en una situación difícil y, con la fecha de parto todavía a meses de distancia, se preguntan si el bebé nacerá con alguna discapacidad o si podrá siquiera sobrevivir.
Según cuenta la madre de Adriana en su página de GoFoundMe, en un principio Smith se quejó de un dolor de cabeza, fue a dos hospitales, pero le dieron medicamentos sin hacerle exámenes. Poco después, la encontraron inconsciente.
Aunque la mujer permanece conectada a un respirador y a otros dispositivos de soporte vital, los médicos la declararon con muerte cerebral, lo que significa que está muerta.
Según Los Ángeles Times, el hospital donde se encuentra Smith no ha revelado lo que se está haciendo para permitir que el feto siga creciendo dentro de la mujer muerta.
Adriana tiene un hijo de 7 años y una familia que está destrozada. Ellos mientras tanto, recaudan fondos y piden oraciones y apoyo. ¿Tú qué opinas?