Siempre hemos oído la recomendación de no cruzar las piernas y de evitarlo al máximo. Pero… ¿es realmente malo?

Antonio Martín Conejero, angiólogo y cirujano vascular del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, explicó en conversación con Infosalus que “una persona puede tener un problema en el retorno venoso si cruza las piernas de manera muy continuada, y permanente; pero siempre y cuando tenga de base un problema de retorno venoso”.

“Es decir, que esto excluye a la mayor parte de las personas. Si en su rutina las personas con problemas en el retorno venoso cruzan sus piernas, esto no le implicará el que les salgan o empeoren sus várices, aquí también hay más mito que verdad“, asegura este experto.

Eso sí, llama la atención porque en pacientes muy seleccionados, con problemas serios del retorno venoso de base, evidentemente esta posición de forma continua no les ayudará, aclara Conejero.

“A la gran mayoría de personas no les supone ningún problema el cruzar las piernas, y hay que erradicar el concepto de que han salido várices porque se tenga la costumbre de cruzar las piernas”, insiste el angiólogo.

¿Y si estamos sentados mucho tiempo?

Para quienes tienen el problema de retorno venoso, una insuficiencia venosa severa, al cruzar las piernas, además se está manteniendo flexionada la rodilla, y así hacemos una especie de doble dificultad para el retorno venoso ascendente, explica este experto.

“Si estamos sentados con la rodilla flexionada, esto hará que una de las principales funciones para retornar la sangre se dificulte, el bombeo de la bomba de los músculos soleo y gemelo, porque el retorno venoso, de manera normal, se hace casi siempre por la contracción de los gemelos en la marcha”, explica.

Y añade que “aunque hay otros factores implicados, el más decisivo es este. Por eso se dice que caminar es bueno para el retorno venoso”.

Los tacones tampoco ayudan

De la misma forma, ¿en qué otra situación no favorecemos esta contracción periódica del soleo y del gemelo?

El doctor Martín Conejero sostiene que también afecta mucho a las mujeres al caminar con tacones.

“Cuanto mayor tacón hay, el pie tiene una configuración del zapato que hace que los gemelos no se contraigan bien, de manera que el retorno venoso no sea el óptimo”

En ese contexto, recalca que si la mayor parte de mujeres usan tacón, no les pasará nada en este sentido

“Todas estas cosas serían un problema para quienes, de base, tengan diagnosticados problemas de retorno venoso serio. Pero quienes tienen sus arañas vasculares no les pasará nada por estar sentadas con las piernas cruzadas, o por caminar con tacones”, resalta este doctor.

Así, insiste en que en estos pacientes que de manera continuada deben estar sentadas de 8 a 10 horas, por ejemplo, lo idóneo es el empleo de medias de descanso que facilitan el retorno venoso.

Además, el doctor Martín Conejero recomienda cambiar de postura cada cierto tiempo si permanecemos sentados.

“En alguna persona sana con que te levantes cada dos o tres horas, listo. Pero en las personas sanas, en verano especialmente, o si tienes un viaje o no te mueves y se te hinchan los pies, no es que estés mal o tengas un problema de salud, sino que de forma fisiológica no has estado activando esa bomba soleo-gemelar y se acumule el líquido en la parte más distal y se te hinchan los pies”

Finalmente, y a modo de resumen, el angiólogo desmitifica la idea de que cruzar piernas produce várices. No lo hace, pero tampoco el estar sentado de forma prolongada, o el estar de pie mucho rato.

Ahora bien, sí destaca que son factores agravantes si hubiere una predisposición genética.