Loralie Henry tiene 9 años y pasó la mitad de su vida en hogares de acogida en Los Ángeles, Estados Unidos.

Llegó por primera vez a uno cuando tenía cuatro años, después volvió brevemente con su madre biológica, y regresó al sistema a los seis.

“Fue realmente aterrador. No sabía qué esperar en otros hogares o qué me darían de comer”, dijo la pequeña a ABC7 News.

“Así que pensé ‘¿qué debo hacer?, ¿hay alguien esperándome?’ Estaba realmente asustada hasta que conocí a mi mamá. Mi maestra de segundo grado”, agregó.

Historia de adopción

Zoe Henry es una docente que vive en La Verne, California. Una madre soltera que no tenía en sus planes adoptar.

Eso, hasta que conoció a Loralie. “Ella vino a mi clase… sus pequeñas pecas, su pequeña marca de nacimiento”, dijo Zoe.

“Voy a adoptar a esta niña. Ella fue mi hija en el momento en que la vi”, reconoció.

La profesora pensó que Loralie sería adoptada por otra familia, pero descubrió que eso no iba a suceder. Luego, le rogó a los trabajadores sociales que la dejaran adoptar y lo hicieron, informó el medio británico Metro.

“Ella ha estado en muchos lugares, tuvo muchos obstáculos para encontrar su camino. Estamos muy agradecidos por ese viaje, que la ha convertido en una niña valiente, fuerte y simplemente increíble”, comentó la maestra.

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Asimismo, se refirió a la madre de la menor de edad. “Los padres biológicos tienen derecho a impugnar, pero eso no sucedió. Sé que su mamá la ama, sé que realmente quería lo mejor para ella”, aseguró.

Cabe recordar que el pasado 20 de noviembre se celebró en Estados Unidos el Día Nacional de la Adopción.

Loralie estaba entre otros 165 niños adoptados oficialmente por sus familias para siempre, por lo que ya no estarán bajo el cuidado del Departamento de Servicios para Niños y Familias del Condado de Los Ángeles.

Como en Matilda

El acto de amor recorrió el mundo y lo comparan con la conmovedora historia de la película Matilda de 1996.

El filme cuenta la historia de Matilda Wormwood (Mara Wilson), una niña superdotada cuya inteligencia supera con creces a la de su inculta familia.

Este hecho provoca que se sienta aislada en su hogar al percibir que es incomprendida por sus seres queridos, quienes no entienden la razón por la que Matilda posee semejantes cualidades intelectuales.

Su vida da un drástico giro cuando empieza el colegio, donde forma un especial vínculo con su profesora Jennifer Honey, una mujer que dedicará todo su esfuerzo en conseguir que la protagonista se convierta en una chica con un potencial aún mayor.