Nicky Foxley es una madre que se vio enfrentada a una de las situaciones más difíciles de su vida: explicarle a su hija de dos años por qué su pelo se caía, debido a la quimioterapia a la cual ha sido sometida.
Y es que la pequeña Elara padece neuroblastoma, uno de los cánceres que se forman en las células nerviosas inmaduras que se encuentran en varias áreas del cuerpo, siendo uno de los más letales entre los infantes, indicó la Clínica Mayo.
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Fue en 2019 cuando Foxley comenzó a preocuparse por la salud de su hija, luego que le salieran hematomas en la cara. Tras esto la llevó al médico, quienes inmediatamente comenzaron con el tratamiento, el mismo que le ha significó un deterioro físico y la pérdida de cabello.
“Mi mundo se vino abajo. En su cumpleaños se veía peor que nunca, tan delgada y con tanto dolor. No tenía la energía para apagar las velas”, declaró la mujer al medio inglés The Mirror. Pero se repuso para combatir la enfermedad.
Frente a esta situación, su hija le preguntó por qué ocurría esto. Fue ahí cuando Nicky decidió recurrir a una mentira piadosa y plagada de magia, para hacer frente a este duro momento, recurriendo a sus personajes favoritos de cuentos infantiles.
“Las hadas se llevaron tu pelo”, le explicó la mujer de 37 años a su hija, quien agregó que “le dije que Tinkerbell lo traería de vuelta el próximo año con su polvo mágico”, comentó.
No fue lo único, ya que también le contó que ella tenía “un pequeño monstruo” en su estómago y que gracias a los súper poderes que adquirió de sus peluches de Elsa y Anna (de Frozen) pudieron sacarlo, para explicarle la cicatriz en su viente, la misma que ahora Elara llama “la marca del monstruo”.
“En las horas más oscuras, es increíble cómo te las arreglas para sobrellevar la situación, para poner una sonrisa en el rostro de alguien cuando está pasando por un infierno”, dijo Foxley al citado medio.
Buenas noticias
Y todos los esfuerzos dieron sus frutos, ya que los escáneres mostraron que la niña había superado el cáncer y estaba en remisión. No obstasnte, Foxley tendrá que seguir usando el mismo ingenio y amor, para explicarle en el futuro algunas secuelas de la enfermedad.
Lo anterior, ya que a Elara le extirparon un ovario lo que probablemente le traiga problemas futuros de fertilidad. Asimismo, tiene dos orificios en el fémur izquierdo y posee una discapacidad auditiva en ambos oídos.
No obstante Nicky reconoce que “es un milagro verla ahora, riendo, bailando por la habitación. Ahora 2021 será el mejor año de nuestra historia. Elara comenzará el jardín de infantes el próximo mes. Está rebotando de energía y tenemos un futuro”, afirmó.
Por último, Elara ahora usa una mochila especial para dispensar el medicamento de inmunoterapia en su cuerpo las 24 horas, los 7 días de la semana, lo que le da la libertad de salir del hospital y estar en casa.
