Un bello gesto, llevado a cabo en Argentina, ha traspasado la frontera. El protagonista es Eduardo Fonseca, el dueño de una vidriería de la localidad de Centenario, en la provincia de Neuquén.

Este hombre quiso premiar el esfuerzo, la lealtad y el compromiso de Franco Núñez, uno de sus empleados con el que ha trabajado por cinco años, dándole un importante obsequio: su primer auto.

Y para esto ideó toda una sorpresa, ya que le dijo a Franco que fuera al taller con su esposa e hijos para compartir un momento. No obstante, su sorpresa fue mayúscula, cuando se encendieron las luces.

El trabajador sólo alcanzó a ver el Fiat Duna blanco, cuando Eduardo señaló: “Es tuyo”. Fue allí cuando Franco, aún incrédulo, comenzó a revisar el vehículo, encontrando una cartulina naranja en la parte posterior del coche, con un emotivo mensaje.

“Premio a la lealtad, compromiso, responsabilidad y al amor que le pones a tu labor”. Tras esto se cubrió la cara con las manos y sólo atinó a abrazar a su jefe por el noble gesto, mientras repetía “no lo puedo creer”.

mensaje eduardo fonseca
Infobae

Su historia

Eduardo y Franco se conocen hace más de una década, cuando trabajaban en una fábrica de aluminio, pero tiempo después Fonseca decidió instalarse con su propia cristalería, llevándose a su amigo a trabajar con él.

“Hace poco me pidió que lo acompañara a ver un Renault Doce Rojo que le habían ofrecido, pero estaba destruido. Así que le dije que me parecía una mala inversión y le sugerí que no lo comprara”, relata Fonseca a Infobae.

Debido a lo anterior, es que Franco ocupó el dinero ahorrado para materiales y así construir su casa, aunque la idea del auto no quedó olvidada, al menos no para Eduardo, quien se puso manos a la obra, hasta dar con el vehículo indicado.

Se lo di como una sorpresa, como un premio a los cinco años que lleva trabajados conmigo porque es cumplidor y le pone amor a lo que hace diariamente”, manifestó al citado medio.

“Yo trabajo desde los trece años y, en los empleos por los que pasé jamás me reconocieron nada: nunca me pagaron las horas extras o me invitaron a comer un asado (…) La idea es que si yo progreso, ellos progresen conmigo“, sentenció en un gesto que ha recorrido las redes sociales.

Revisa el momento de la sorpresa: