Un joven obsesionado con las redes sociales, un freelance que pasa pegado a la pantalla de su computador o un fanático de Instagram que bordea los 30 años y que aún vive con sus padres.

Esas son algunas de las características que identifican a los millenials, los cuales muchas veces son catalogados como frívolos, consumistas, egoístas y superficiales. Ahora se sumó una nueva característica: no son asiduos a las relaciones sexuales.

Esto, luego de que la revista estadounidense Archives of Sexual Behavoir revelara que el 15% de los millenials entre 20 y 24 años asegura no tener pareja sexual desde los 18 años, subiendo 9% en relación a las respuestas brindadas por personas de la generación X en el mismo rango etario.

“Esto es probablemente otro síntoma de la maduración cada vez más tardía que se está viendo en las nuevas generaciones”, sostuvo Jean Twenge, uno de los investigadores del estudio.

Uno de los motivos por el cual se atribuye esta situación es que los millenials suelen vivir con sus padres, lo que los limita a la hora de tener alternativas para tener relaciones sexuales.

Otro factor que influye en esto es la proximidad que tienen estos individuos con la pornografía, la que es mucho más accesible para la generación de jóvenes actual, que para las pasadas.

Todo esto se suma a la encuesta que realizó BlindLove, aplicación dedicada a encontrar parejas, que arrojó que este desinterés no sólo se limita a la sexualidad, sino que a la capacidad de establecer relaciones serias.

Lo anterior, puesto que de toda la red de esta aplicación, sólo el 13% de los usuarios millenials declararon utilizar esta herramienta.

¿Qué sucede en Chile?

Una situación bastante similar es la que ocurre en nuestro país, según se pudo apreciar en la última encuesta Casen.

Los jóvenes muestran cada vez menos interés en el matrimonio, ya que solamente el 4,9% de la población menores de 30 años está casado, mientras que en 1990 esta cifra alcanzaba un 27%.

Según el mismo estudio, la edad en la cual se contrae matrimonio, también ha presentado cambios. A comienzo de la década de los 90, la mayoría lo hacía entre los 26 y 27 años, en tanto que en 2017 se da a los 36 años en los hombres y a los 33 años en las mujeres.