Los desconocidos peligros que esconde el síndrome del ‘trasero dormido’ y cómo prevenirlos
El trabajar sentado durante ocho o más horas diarias siempre ha sido un problema. Sobre todo si además del trabajo llevas una vida sedentaria o con poca actividad física. Problemas cardiovasculares, cáncer y diabetes son solo algunos de los riesgos que se ven incrementados al permanecer mucho tiempo sentado.
Probablemente si eres de los que vive esta realidad a diario, más de alguna vez te has percatado de una sensación como de adormecimiento del trasero, algo que si bien muchos no le prestan mayor atención, puede convertirse en un serio problema de salud.
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Conocido también como “amnesia gluteal”, este síndrome se da cuando el trasero se inflama y se le “olvida” funcionar normalmente, según consigna un artículo publicado en el Huffington Post.
“Permanecer sentados mucho tiempo limita el flujo sanguíneo, lo que provoca amnesia gluteal, que a su vez puede provocar dolor de cadera, dolor lumbar y problemas en los tobillos. Puede que los glúteos no respondan correctamente incluso aunque hagas ejercicios enfocados en estos”, señaló a este medio Donovan Green, entrenador personal de famosos y autor del libro No Excuses Fitness: The 30-Day Plan to Tone Your Body and Supercharge Your Health (Ejercicio sin excusas: plan de 30 días para tonificar tu cuerpo y sobrealimentar tu salud).

Pixabay (cc)
En la misma línea, la fisioterapeuta Kelly Starrett, indicó que los glúteos no están diseñados para soportar mucho peso durante periodos extensos, por lo que estar mucho tiempo sentados reduce la capacidad que tiene el cuerpo de utilizar músculos muy fuertes como los glúteos en caso de necesidad. “Es como si te quieres hacer un bocadillo, pero lo sometes a mucha temperatura y alta presión hasta hacer un sándwich de queso fundido. Estar todo el día sentados en los glúteos es lo mismo“, describió Starrett.
Asimismo, “la postura permanentemente flexionada de la cadera y la compresión de los tejidos son los ingredientes que dan pie a una tormenta perfecta para desactivar la función de los glúteos o, como suele decir la gente, tener el trasero dormido“, agregó.
Según Mark Benden, director del Centro de Estudios de Ergonomía de la Universidad de Texas, en términos técnicos lo correcto es llamarlo parestesia, “una sensación anormal debida a la compresión o irritación de los nervios”.
¿Estoy empezando a sufrir este problema
La principal causa de este problema es la inactividad, por lo que si no realizas pausas cada cierto tiempo, tus posibilidades aumentarán considerablemente. “Se ha demostrado en múltiples estudios que permanecer sentados durante largos espacios de tiempo provoca un efecto importante en la capacidad de contraer y utilizar los glúteos de forma efectiva“, explicó Green.
Si sientes los músculos de la cadera tirantes, también puede ser un signo de este síndrome, ya que si no tienes una flexibilidad adecuada, estás “exprimiendo todo el jugo o la energía del glúteo porque el movimiento es tan forzado que el “glúteo mayor” no tiene acceso a la suficiente energía para funcionar plenamente. Hay que recordar que el glúteo mayor es el grandote y necesita mucho rango de movimiento para activarse y hacer su trabajo como debe”, añadió el entrenador personal.
Realizar ejercicios equivocados o de forma incorrecta también influye, ya que cuando un ejercicio no logra enfocarse en el músculo que se desea trabajar, los pequeños músculos auxiliares asumen todo el trabajo. La consecuencia de esto es que los músculos pequeños se fortalecen quitándole los estímulos necesarios a los glúteoss.
El entrenador señala que lesiones y problemas de artritis también pueden provocar la desactivación de un músculo como forma de “proteger” una articulación, inmovilizando esta o un hueso.
¿Cómo se puede prevenir?
Según Jeff Bell, cofundador e instructor principal del popular gimnasio Belleon Body NYC, “el glúteo mayor está diseñado para dar fuerza y velocidad y necesita ser alimentado con una dieta regular de ascensos, sentadillas, trotes, zancadas y caminatas para mantenerlo en su mejor forma, o para que al menos así lo parezca“.
El deportista aseguró que el mejor modo de prevenir el síndrome del trasero muerto es mantenerse activo y sano. Debes saber que aunque permanezcas sentado durante largos periodos, lo recomendable es que te tomes con frecuencia descansos para ponerte de pie, estirar y caminar un poco.
“Una regla fácil de recordar es que por cada hora que pases sentado te tomes 10 minutos para ponerte en pie y caminar un poco y así reactivar y evitar que los músculos del trasero se duerman“, aconsejó.