Disneyland representa para miles de niños una experiencia inolvidable, por lo que muchos sueñan con algún día visitar sus instalaciones y participar de sus actividades.
Precisamente así se sentía un niño británico antes de visitar el parque temático de Disney ubicado en París, Francia, ya que una vez adentro, éste de ser un lugar especial tras ser discriminado de una actividad en la que podía ser “princesa por un día”.
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Hailey McLean Glass, madre del pequeño de tres años, fue quien denunció la situación que vivió Noah, al que se le negó la oportunidad de asistir al recinto para convertirse en el personaje Elsa de la película Frozen.
A través de una carta enviada por la empresa, le anunciaron a McLean que su hijo no podría participar de tal actividad, como respuesta a su petición.
“Nos hemos gastado una pequeña fortuna en cosas de Disney para él. Noah se pone el vestido de su adorada Elsa todo el día, cada día. No quiere ni quitárselo para dormir. Se sabe cada palabra de ‘Let it go’ y de todas las canciones de Frozen“.
Mirando un grupo de Disney en Facebook encontré unas fotos preciosas de niñas vestidas de princesas en la actividad “Princesa por un Día”, en una sesión fotográfica en un hotel de Disneyland. Noah estaba sentado a mi lado y cuando las vio ¡no podía parar de la emoción!.
Decidí que quería regalarle esa experiencia para Navidad. Sabía que no habría NADA que le gustara más que ponerse ese precioso vestido, maquillarse como mamá y ser fotografiado como una de sus amadas princesas Disney. Así que les mandé un correo y esta fue la respuesta”
Esto fue lo que le dijeron desde la empresa.
“Estimada señora McLean. Gracias por su correo y su interés en Disneyland París. En este momento no es posible reservar “Princesa por un Día” para un niño. Sin embargo, estaríamos encantados de ofrecerle un paquete a medida con artículos de princesas como un libro de autógrafos, un peluche y varios juegos, por un precio de 300 euros, IVA incluido (el presupuesto mínimo requerido para nuestros servicios)”, señalaron.
La situación la enojó tanto que decidió responderles en una misiva, donde manifestó su total descontento y repudio al actuar de la compañía. “¿Por qué mi hijo no puede ser una princesa en Disneyland?”, comenzó diciendo la madre, en la carta que publicó en su blog.
Frente a la viralización masiva del texto, según consignó el medio francés Mashable, la respuesta de Disneyland no tardó en llegar, y fue la propia madre quien lo reveló en nuevo artículo publicado en su portal.
“Nos confirman que la respuesta que recibimos no refleja sus políticas y prometen que van a informar del cambio a todo el personal al respecto. Que ahora han cambiado la frase de su web en la que decían que la experiencia era para ‘cumplir los deseos de las niñas’, haciéndola más inclusiva. Lo que demuestra de sobra que la respuesta a mi petición inicial era inmoral e ilegal”, informó la madre de 29 años.
