Joven hizo a niña su esclava a través de internet y hasta le ordenó beber su propia orina
De alguna manera un joven, aparentemente común y corriente, lograba cautivar a dulces adolescentes y transformarlas en verdaderas esclavas sexuales virtuales, chicas que hacían todo lo que este hombre les exigía a través de una cámara web.
A través del chantaje el muchacho pronto controlaba a sus víctimas, que no encontraban manera de escapar de los castigos y humillaciones a través de internet.
El delincuente es Daniel Howarth, de Manchester, Inglaterra, que logró hacer que dos víctimas realizarán bizarros actos sexuales a través del dispositivo de grabación de su computador personal y además tenía cientos fotografías pornográficas de los menores. Ambos afectados tenían sólo 15 años.
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La pequeña, de Georgia, Estados Unidos, tenía depresión y recientemente se había cambiado de escuela cuando comenzó a conversar con el victimario, así comenzó el reinado de dominación de Howarth.
La conoció en la popular red social Kik en noviembre del 2014. Entraron en un chat privado y conversaron toda la noche y todo terminó en un intercambio de imágenes íntimas. Él le prometió apoyarla y ser su amigo, pero días después se molestó porque la niña no quiso enviar más fotografía, lo que hizo que ella finalmente cediera.
Una vez que coleccionó una buena cantidad de imágenes la amenazó con enviarlas a su colegio si es que no hacía caso a todo lo que él dijera. Los próximos tres meses fueron un infierno.
La obligó a no ducharse, a ‘vivir’ de noche, comer café y su propio pelo y tomar su propia orina. Le hizo enviar imágenes de ella haciendo actos sexuales y escribiendo frases ofensivas en su propio cuerpo. Incluso la hizo ridiculizar a otros hombres en linea fingiendo que le gustaban.
Incluso la amenazó con viajar a Los Estados Unidos y violarla frente a toda su familia y la castigó haciéndola sacarse 100 fotografías desnudas durante la noche.
Finalmente la pequeña, cuya identidad no puede ser revelada por motivos legales, no pudo con la presión y le contó todo a una amiga y a una profesora, lo que permitió que el sujeto fuera rastreado y detenido.
La chica viajó más de 6400 kilómetros hasta Manchester para enfrentar a su ‘captor virtual’ en el juicio y ahora ella fue quien le dio órdenes.
“Mírame a los ojos cuando te hablo… Dios te perdone, y yo te disculpo”, le dijo la niña al depravado delincuente cuando salía de la sala luego de ser condenado a prisión por cuatro años, tras los cuales quedaría en libertad vigilada hasta el 2021.
“Es un joven absolutamente ‘enfermo'”, declaró Juez Richard Mansell sobre Daniel Howarth que fue procesado por los delitos de incitación a menores de realizar actividad sexual, incitar a menores a producir pornografía, posesión de imágenes indecentes de menores y posesión de material pornográfico infantil de nivel extremo.