Nos han dicho que consumimos demasiada sal y que eso nos expone a enfermedades cardíacas, pero ¿sabemos dónde se encuentra?
¿Eres de los que siempre pilla media desabrida la sopa y tienes que echarle más sal? Sabemos que deja tus comidas mucho más deliciosas, pero abusar de este recurso te expone a una larga lista de problemas, entre los que se encuentran la hipertensión, accidentes cerebrovasculares y osteoporosis.
El chileno promedio consume 14 gramos diarios de este producto, pero lo recomendado a nivel mundial son 5 gramos.
El problema es tan grande, que el Ministerio de Salud decidió crear un programa especial para reducir su consumo, apuntando a uno de nuestros alimentos preferidos: el pan. Se espera ir rebajando poco a poco el sodio hasta dejarlo a la mitad y con esto, 430 mil chilenos se salvarían de sufrir enfermedades cardiovasculares, según La Tercera. Pero no sólo en nuestra panera se encuentran las mayores cantidades de sodio, tal como detallan en el portal People. Aquí van ocho comidas que son un atentado terrorista a tu presión sanguínea (y ni siquiera lo sabías).
1) Cereal
Es el favorito de los niños gracias a sus animados colores y personajes animales que saludan desde sus cajas. Pero la mayoría de los cereales que encuentras en el supermercado tienen entre 180 a 300 mg. de sodio por porción, por lo que si te gusta comerlo al desayuno y a la once y llenas el plato hasta arriba, probablemente superes tu consumo diario. Hay varias marcas que están intentando reducir este monto y hasta agregarle Stevia, pero siempre será más sano comer avena natural o granola de confección casera.
2) Donas
No sólo son muy dulces y sabrosas, también son altísimas en calorías y en sodio, alcanzando tranquilamente los 326 mg. Lo mejor sería evitar este alimento en absoluto, pero si te gustan los productos de repostería prefiere los de preparación casera y que sean horneados (las donas son fritas).
3) Embutidos
Las vienesas, jamón y salami no sólo son una pésima fuente de proteína y un contenedor de grasa: también tienen mucha sal. Según una nota del Huffington Post, consumir sólo seis láminas al día puede contener la mitad del sodio que requieres a diario.
4) Pollo
Sabemos que es una sana forma de comer carne, debido a sus bajos niveles de grasas saturadas, pero lamentablemente la mayoría de los productores lo venden “marinado”: es decir, le inyectan agua con sal a la carne. Por eso la Organización de Consumidores y Usuarios de Chile ordenó un estudio técnico en conjunto con la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Chile; en esta investigación se descubrió que el 90% de los pollos que se venden en el mercado son marinados y que pueden contener 117 miligramos de sodio en una porción mediana (100 gramos). Lo recomendable es comprar pollo sin marinar, que contiene menos de la mitad de sal.
5) Salsa de tomate y condimentos
Lo que le pones a tus tallarines puede contener hasta 400 mg. de sodio por porción, aunque varía según la marca. Una cucharada de mayonesa puede contener 125 miligramos, mientras que el ketchup alcanza tranquilamente los 190. Y esto es sólo en una porción pequeña, ¿cuando fue la última vez que le echaste una cucharadita de ketchup a las papas fritas? Cuando se trata de pastas, lo mejor sería preparar nuestra propia salsa con tomates naturales y aliños medidos.
6) Chocolate caliente
Que sea dulce no significa que no contenga sodio: un sobrecito de esta bebida puede contener el 7% de tu consumo diario. Quizá no sea tanto, pero si lo tomas repetidas veces en el día pueden haber problemas, por lo que se recomienda no abusar.
7) Queso
Sabemos que agregarlo a tu sandwich le dará mucho más sabor, ¿pero sabías que también te dará hipertensión? El queso mozarella contiene 370 miligramos, mientras que el gouda alcanza tranquilamente los 512 mg, como detallan en la web de fitness Vitónica. Así que reducir su consumo no sería una idea tan loca.