La semana pasada se viralizó a través de las redes sociales una desgarradora noticia. Se trata de la historia de Drayke Hardman, un niño de solo 12 años que decidió quitarse la vida tras sufrir bullying en su colegio en Utah, Estados Unidos.
Con el fin de crear conciencia sobre el hecho, sus padres hicieron pública la dolorosa pérdida luego de que sus hermanas mayores lo encontraran ahorcado con una prenda de vestir.
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Varias fueron las figuras del espectáculo que alzaron la voz, entre ellas Faloon Larraguibel, quien a través de su cuenta de Instagram se refirió a la muerte del menor de edad.
“Qué desgarradora es la historia del pequeño Drayke, en serio es terrible solo pensar de que tu hijo no volverá a estar junto a ti”, partió comentando sobre la foto en la cual aparece con su hija Luciana.
La exintegrante de Yingo mostró su pena “de que sigan sucediendo estas cosas, y mucho más con las redes sociales. Lo vimos en nuestro país en el año 2018 cuando Katy Winter decide terminar con su vida”.
En ese sentido, la modelo hizo un llamado a los padres, a educar y guiar y a sus hijos para que así no sucedan hechos de bullying. “Nosotros como padres tenemos el deber de inculcar valores, de que todos somos personas y merecemos respeto”, recalcó.
De hecho, la comunicadora entregó algunas recomendaciones de los expertos para evitar que los niños realicen bullying.
Entre ellas, recomendó escuchar siempre a los niños, ayudarlos a diferenciar los límites y enseñar a ser amables y respetuosos.
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“Educarles en valores de empatía, respeto y diversidad. A veces los niños se enfocan en aspectos físicos de otras personas. Educarles en una sociedad inclusiva”, añadió.
En esa misma línea, precisó que hay que “inculcarles confianza en ellos mismos. Es esencial que los niños se sientan seguros y valorados desde muy pequeños”.
Para finalizar, explicó que lo más importante “creo yo es prestar atención a nuestras propias actitudes y comentarios, porque todo lo que ven o escuchan los niños les afecta muchísimo y lo adoptan en su día a día, no normalicemos el molestar a otra persona”.