Andrew Dale Marcum no era un estadounidense muy agradable: La justicia norteamericana lo buscaba por cielo, mar y tierra, ya que estaba acusado de robo, secuestro y violencia doméstica.
Para lograr dar con su paradero, la Oficina del Sheriff del Condado de Butler posteó en Facebook un serie de fotos suyas, junto a su descripción física y cargos que se le imputaba. Lo que jamás esperaron es que el mismo Andrew escribiría en esta publicación.
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“Me he tropezado con ustedes y ni siquiera me reconocieron”, fue el mensaje que dejó el despistado ladrón. Rápidamente le respondió Richard Jones desde la comisaría: “Si pudiera pasar por la oficina del alguacil, sería genial”.
Incluso, el sheriff le envió un tuit revelando la imagen de su futura celda. El uniformado cumplió, ya que gracias a este post, Marcum pudo ser detenido un día después.
