En la actualidad, aprenderse de memoria un número de celular es una difícil tarea tomando en cuenta que aplicaciones de mensajería instantánea como como Whatsapp y Line, llevan la delantera en cuanto a comunicación entre móviles.
Es por eso, que Nicolás Reyes decidió subastar su particular número de teléfono 9-2345678, prometiendo ser el salvavidas para aquellos frágiles de memoria.
La historia comenzó en 1998, cuando Nicolás intentó adquirir un teléfono de contacto que fuera fácil de recordar dado que en ese entonces tenía una empresa de turismo, según le comentó a LUN.
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Reyes, señala que cuando da su número nadie le cree y piensan que es una broma. “Es fácil, divertido, y hasta poco creíble“, añadiendo que lo vende simplemente porque ya no lo necesita.
Tantos son los “cabeza de pollo” que cuando el domingo publicó la oferta en los clasificados de El Mercurio, en menos de 24 horas tenía cinco propuestas de compra.
Lo más increíble de todo, es que la subasta del número ya va en los tres millones de pesos, por lo que se espera que la cifra siga aumentando.
