Miño es sin duda uno de los mayores éxitos de Los Bunkers, la banda chilena que abrirá la quinta noche de Viña 2024.
Se trata de una de las canciones con ritmo más movido de la banda penquista, pero que tiene una emotiva historia detrás.
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Mauricio Durán, en su libro Canción para mañana, Memorias de Los Bunkers, cuenta cómo fue que junto a su hermano, Francisco Durán, escribieron y compusieron el tema que hace vibrar a miles en la actualidad.
La historia detrás de Miño de Los Bunkers
El 30 de noviembre de 2001, Eduardo Miño, trabajador y militante del Partido Comunista, tras hacerse una herida en el abdomen, se roció con líquido inflamable y se prendió fuego frente a La Moneda.
Lo anterior, luego de que minutos antes repartiera un informativo donde denunciaba las negligencias para con las víctimas del asbesto, mineral que una vez que se ingiere en grandes cantidades, genera graves problemas a la salud.
En el texto, el guitarrista reveló que en ese tiempo "sentía que la banda necesitaba canciones más dinámicas para incluir en el show. Temas más conocidos eran Entre mis brazos y El Detenido, que siempre consideramos de tiempo medio. Fantasías…, era el único tema del primer disco que podíamos considerar realmente rápido".
"Supongo que Pobre corazón, Lo que me angustia, Sabes que… y Miño nacieron bajo esa lógica", expresó, para luego comentar que con su hermano comenzaron a trabajar en ello.
"La idea era crear un tema dinámico que hiciera referencia a lo que había pasado con Eduardo Miño. No sabíamos muy bien qué queríamos exactamente, pero teníamos claro lo que no, y confiábamos que explorando el camino se nos iría revelando el tono que buscábamos. No era nuestra intención hacer una denuncia ni un homenaje. Intuíamos que la canción debía dar cuenta del sentimiento de abandono, sin inspirar lástima y, muy por el contrario, tenía que dejar entrever la fuerza y la necesidad de apoyarnos unos a otros".
Sobre el proyecto, Durán aseguró que quería plasmar "una imagen distinta para cada frase de la canción, de manera que escucharla fuera como hojear el álbum fotográfico de un desconocido. Quería hablar de recuerdos, pero como no conocí personalmente a Eduardo Miño, pensé, bueno… le presto los míos".
Felipe Constanzo | Agencia Uno
De esta forma, el artista recurrió a su infancia en la población René Schneider, de Hualpén, de donde surgieron frases como "'Todos colgados tras el camión', que se refiere a esas tardes en que pasaba un camión y mis amigos corrían a colgarse del parachoques trasero para que el vehículo los acarreara unos cuantos metros".
"En cuanto a 'las mismas rejas oxidadas por el sol', lo escribí porque cuando era chico creía que el sol oxidaba los metales, hasta que un vecino, el Conejo, nos ayudó a pintar la reja de la casa y me explicó que la humedad la había dañado. Esa frase me parece preciosa. Para mí representa todo lo que uno cree cuando es niño y no es verdad".
Un éxito a todas luces que llegará a Viña 2024
Ante este panorama, Mauricio Durán confesó que decidió ponerse en el lugar de Eduardo Miño para algunas frases, "y conjeturé qué podía estar pensando al momento de tomar su decisión".
"Di con estos versos: 'nadie me esperará / como lo quise ayer / en las veredas, como imaginé'. En ese momento pensé que había dado en el clavo, que había encontrado la línea que resumía la canción. Además, me gustaba mucho que existiera un énfasis melódico en la frase 'como imaginé', a la que más tarde Álvaro terminaría por otorgarle la vehemencia precisa en la grabación del disco", expuso.
Posteriormente, la banda contó con la producción del integrante de Los Tres, Álvaro Henríquez, quien hizo algunas modificaciones a la propuesta.
"Todos los cambios que sugirió fueron bien recibidos (…) Estoy convencido de que al bajarle los decibeles, Miño se volvió más pop y accesible, y pudo aspirar a la transversalidad que finalmente obtuvo".
Finalmente, la canción consiguió convertirse en un éxito, pese a que "había nacido de un hecho tan duro e individual".
"En un Teatro Providencia repleto, escuchamos a mil doscientas personas cantar nuestra canción. La cantaron fuerte, mucho más fuerte que nosotros, y eso abrigó el corazón del grupo para siempre. La canción comenzó un recorrido paralelo al de la banda, primero por todo Chile, y unos años más tarde por muchos lugares de América", concluyó.
