Pancho Melo transparentó por qué aceptó coanimar Festival de Viña con Karen Doggenweiler

En noviembre, se anunció que, además de Karen Doggenweiler y Rafael Araneda como animadores del Festival de Viña, Pancho Melo también tendrá un especial papel dentro del certamen.

El actor, que actualmente es uno de los protagonistas de Los Casablanca, participará como coanimador, junto a José Antonio Neme, Rodrigo Sepúlveda, Tita Ureta y Paola Volpato, en la Quinta Vergara.

Al respecto, el actor comentó a Página 7 que, cuando le dieron la posibilidad, "fue una sorpresa, fue gracioso".

"Me pareció encantador formar parte del Festival desde esa tribuna, que tiene que ver con una coanimación con la Karen alguna noche que todavía no nos han dicho, con respecto a la competencia internacional y folclórica", explicó.

En cuanto a su preparación, reveló que "hemos tenido reuniones de quiénes son todos los rostros de Mega que están a cargo de una parte del Festival. Vienen ensayos potentes para simular lo que significa subirse a la Quinta".

"Ya está en preparación el tema de cómo va a ir uno vestido, así que, combinando entre los teatros, Concepción, Los Casablanca y Viña, estoy conviviendo con los distintos desafíos que la vida me ha invitado a participar, así que feliz", recalcó Pancho Melo.

El desafío de Pancho Melo en el Festival de Viña

Esta será la primera vez que Pancho Melo hará de coanimador en un espectáculo de esta categoría.

"Me parecía tan extraño y ajeno, que creo que en la vida, cuando te ofrece ciertas oportunidades donde sales de tu zona de confort, hay que atreverse a tomarla, hay que asumir los riesgos más allá de lo que suceda. Es una experiencia que no tenía por qué dejarla pasar", manifestó.

En cuanto a la diferencia de este desafío en el Festival de Viña y el actuar en teatro, destacó que "lo más difícil es que uno como actor sabe qué es lo que va a hacer en un escenario. Aquí, hay ciertas variables o imponderables que generan un nervio con respecto a que uno debe tener la mayor cantidad de herramientas para enfrentar situaciones que pueden salir de la norma. Eso me provoca cierta guata apretada, pero es parte del juego".

Finalmente, expuso que "en general, no me gustan las cábalas, no tengo ninguna, en general, me gusta el riesgo y el peligro".