Marlen Olivari confesó qué ha sido lo más duro de ‘Mundos Opuestos’: “¿Dónde me vine a meter?”
Ya han pasado dos semanas desde el estreno de Mundos Opuestos, donde Marlen Olivari, de 50 años, hizo su debut en los realities.
Pero no todo ha sido color de rosas para la show-woman, ya que ha tenido roces con sus compañeros y extraña mucho a su hijo.
En conversación con La Cuarta, Marlen comentó que “cuando entré y empecé a vivir la experiencia del reality me pregunté ¿dónde me vine a meter?”.
“Comencé a extrañar mucho a mi familia, en especial a mi hijo, por suerte tuve un contacto con él y pude hablar con él. Eso ha sido lo más difícil, estar lejos de él y de toda mi familia. Los primeros días han sido complejos, en especial desde ese lugar”, aseguró.
En ese sentido, expresó que “mientras han ido pasando cosas y hemos ido haciendo actividades, me ha ido gustando el reality y lo he ido disfrutando y entreteniéndome”.
Sobre su experiencia, sostuvo que “siempre estuve tranquila de entrar a un reality porque tengo claro lo que soy y sabía cómo iba a reaccionar frente a ciertas cosas”.
“Sé lo que me gusta y lo que no me gusta, lo que tolero y lo que no tolero. Entonces, desde que llegué, sabía cómo iba a hacer frente a cualquier hecho que pasara. No me iba a sorprender con algo o de mi reacción frente a ese algo”, agregó.
Cómo enfrenta Marlen Olivari el reality
Marlen Olivari también explicó que es una mujer “transparente, cercana, frontal, que dice lo bueno y lo malo. Eso puede caer bien o mal, pero yo soy así y yo defiendo mi forma de ser”.
De hecho, manifestó que “la gente está acostumbrada a la hipocresía en general, y yo voy por otro lado, y me siento orgullosa de ser así, de no mentir y ser sincera siempre, pase lo que pase”.
Además, recalcó que es “una mujer luchadora, con fuerza, que da lo mejor de sí siempre y así estoy viviendo esta experiencia. Y así como puedo ser fuerte, también soy una mujer sensible, simpática y humana. Todo eso es lo que la gente puede ver de mí en el reality“.