Benjamín Nast se sinceró sobre su rol de padre: "Hace 2 años decidí acentuar el foco en mis hijos"

Cada minuto cuenta en la vida de Benjamín Nast. Es dueño de tres restaurantes —De Calle, Demencia y De Caleta, este último en Monticello— y jurado de Top Chef VIP que comienza su tercera temporada.

En 2019, el Círculo de Cronistas Gastronómicos lo nombró Chef del Año. Además, su restaurante Demencia apareció en Latin America's 50 Best Restaurants 2024.

A pocos días del Día del Padre, Nast se detiene para hablar sobre su paternidad con sinceridad y humor. En esta entrevista, comparte cómo equilibra su agenda intensa con el rol que considera más importante: ser papá.

En primer lugar, comenta que “es difícil. Tengo los restoranes, una nueva temporada en televisión y siempre surgen cosas en el camino. Además, soy separado, lo que tiene sus ventajas y desventajas… Pero hace dos años decidí acentuar el foco en mis hijos, que hoy tienen 10 y 8 años”.

Asimismo, reconoce que antes, incluso con menos trabajo, debía estar más alerta y priorizaba menos el tiempo con ellos.

Por otra parte, mantiene una rutina sagrada: se levanta a las 5 AM de lunes a viernes, va al gimnasio, se arregla y luego pasa a buscar a sus hijos a la casa de su mamá para llevarlos al colegio.

Según explica, “ese momento matutino es clave, porque me conecta con ellos y me permite estar presente en su día a día.”

Además, sus hijos se quedan una noche a la semana y un fin de semana por medio con él. “Con la madre de mis hijos tenemos una muy buena relación. Eso me permite estar tranquilo con el tema de la crianza.”

Benjamín Nast y Tengo hambre, papá

En cuanto a su faceta de escritor, Nast cuenta que “sí, absolutamente” le inspiró su rol de padre a crear su próximo libro, Tengo hambre, papá, que está en fase de edición y espera publicar el próximo año.

Según detalla, el libro aborda el rol del hombre en la crianza desde la cocina, pero no es un recetario común. “La intención es más importante que el producto. Si tienes poco tiempo con tus hijos, al menos que sea tiempo de calidad, que construya vínculo.”

De hecho, agrega que “los niños crecen, empiezan a tener su mundo, su independencia... y si no te conectas ahora, después puede ser más difícil".

En relación con su vida laboral, sus hijos suelen acompañarlo en sus jornadas, especialmente cuando va a Monticello. “Ellos nacieron y crecieron en restoranes, ya entienden lo que hace el papá. Les gusta harto ir a Monticello.”

Por último, comparte una anécdota entre risas: “Más de alguien se acerca a pedirme una foto cuando estoy en De Caleta y, en algunas ocasiones, cuando ellos me acompañan, las ofician de mis fotógrafos".

"También se ríen mucho con una imagen mía que es bien grande y que está en el primer piso del restaurante de Monticello, en la entrada. Les llama mucho la atención.”

Benjamín Nast y el Día del Padre

Finalmente, Nast reflexiona sobre el significado del Día del Padre: “Es un recordatorio de lo esencial. Me gusta verlo no como una celebración personal, sino como una invitación a todos los padres a involucrarse, a estar presentes.”

Y concluye: “No se trata de ser perfecto, sino de estar. Y en lo que a mí respecta, si hay una receta que realmente me importa perfeccionar cada día, es la del vínculo con mis hijos.”