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A un año del fallecimiento de Claudio Iturra, su hermana Macarena conversó con Daniel Fuenzalida en El Medio Día, destacando el cariño de la gente y el legado de su hermano como viajero intrépido. Recordó su espíritu aventurero y sacrificado, que impactó en el turismo y le valió un Martín Fierro. Iturra destacó por su autenticidad y magnetismo humano, transmitiendo la aventura del viaje en sus programas con una visión más allá de la televisión.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesEste 23 de mayo se cumple un año desde el fallecimiento de Claudio Iturra a los 43 años, reconocido por ser un viajero incansable, que no dudaba en compartir sus aventuras con los televidentes.
Es por eso que Macarena, hermana del periodista, conversó con Daniel Fuenzalida en El Medio Día.
"Ha sido un año difícil, lo saben todos quienes han pasado un duelo. No es un camino recto, tiene altos y bajos, pero lo que nos queda es el cariño de la gente", aseguró.
Además, destacó que los reconfortaba como familia es "ver que lo que hizo mi hermano en vida, finalmente trascendió más allá de la pantalla, la gente lo tiene presente todavía".
Macarena recordó que Claudio Iturra "siempre fue bien intrépido, con poco miedo a la muerte. Uno siempre pasaba susto, a los 16 años tomaba la mochila, se mandaba a cambiar, a mochilear y no se sabía nada de él en dos meses".
"Siempre tuvo un espíritu bien aventurero y una inquietud de hacer cosas distintas, cosas nuevas, hacer una productora", expresó.
Y, si bien comentó que "viajar es una vida maravillosa", también declaró que es "muy sacrificada, imagínate que mi hermano no pudo formar una familia, porque estaba todo el año afuera, siempre tuvo una vida muy movida".
"Tocó a mucha gente, hizo que aumentara el turismo en ciertos lugares específicos, le reconocieron un Martín Fierro, es algo súper impresionante. Lo que él impregnaba era una autenticidad que no tiene nadie. Su sello", agregó.
De hecho, recordó que "donde él llegaba, conversaba con quien fuera, se hacía amigos, a los cinco minutos estaban todos alrededor de él. Tenía un magnetismo muy especial por la gente, era una preocupación muy humana".
Sobre sus programas, comentó que "era la forma de difundir lo que estaba haciendo, que era viajar, y transmitirle a la gente la aventura del viaje. Él lo vio como un medio, no como el objetivo final, nunca su norte fue la tele".