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Erika Hevia, creadora de contenido de Arsmate, quedó sorprendida al descubrir que su padre era uno de sus seguidores. Tras un malentendido, el padre se suscribió a su perfil y expresó su decepción, aunque luego aceptó la situación. Sin embargo, cuando Erika le pidió que dejara de ser suscriptor, se negó, lo que la llevó a exigir su eliminación. A pesar de este incidente, Hevia continúa destacándose en la plataforma y también se desempeña como conductora de un podcast y practica boxeo para mantenerse en forma.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesMayúscula fue la sorpresa de Erika Hevia (27), creadora de contenido de Arsmate, cuando descubrió que entre los seguidores de su perfil en la plataforma para adultos estaba -nada más y nada menos- que su padre.
La rubia modelo cuenta que jamás esperó encontrar a su progenitor en el grupo de fanáticos.
“Mi papá se enteró de una mala manera: le mandaron el link de Arsmate y se suscribió. Ahí se enteró de muchas cosas”, señala Hevia, quien es considerada una creadora top debido al alcance de sus publicaciones.
Ante tal descubrimiento, Erika cuenta que le dijo a su padre que eran fotos y videos.
“Tampoco es algo malo”, argumentó en esa oportunidad. A continuación, el padre de Erika, quien vive en Iquique, le mandó un texto donde le expresaba su decepción.
Sin embargo, como el tiempo borra las heridas, el papá aceptó.
El problema llegó cuando Erika le pidió al hombre que la vio nacer que no siguiera como suscriptor, ya que ella no podía estar a sus anchas.
“Tuve que dejar de hacer lives ese tiempo porque me daba vergüenza”, señala. Tras negarse, ella exigió que lo eliminaran como suscriptor.
Dos años como creadora de contenido lleva Erika Hevia. Hoy, además de posar para la lente de la plataforma líder en entretención para adultos, conduce un podcast llamado Deseos y más.
Asimismo, mantiene su tonificada figura con deporte de alto rendimiento: practica boxeo.
Sobre gustos, Erika dice que hace algunos años tuvo una especial atracción por los hombres gorditos, pero su gusto ahora está en los músculos y la fibra. “Si yo me cuido, por qué ellos no”, plantea.