Gala Caldirola habló de su historia familiar relacionada con el VIH tras revelación de Caniulef
La revelación de Andrés Caniulef en Palabra de Honor sorprendió a sus compañeros, por lo que en una actividad, Sergio Lagos juntó a los reclutas para analizar los meses en el encierro.
Al respecto, el periodista ahondó sobre sus declaraciones en torno a su diagnóstico de VIH.
“Yo llegué con la idea en la cabeza de contar esto. Esta es la mayor tribuna que podría tener, es el programa más comentado y seguido de Chile, entonces qué mejor lugar que dar a conocer esta información y aclarar puntos desconocidos sobre el tema: Cómo se contagia el VIH, cómo es llegar al examen y decir ‘Soy positivo, ¿qué hago?’”, indicó, y agregó que en su momento la noticia lo impactó mucho.
El periodista precisó que “cuando yo estaba muy enfermo sentí que tenía que dejar un legado. Fue la época de la alfombra roja de Viña, la época en que salí del closet, y sentía que tenía que hacerlo todo antes de que pasara algo”.
“Yo pensaba que me iba a morir. Y lo que hago el día a día es sentirme bien y disfrutar el sentirme bien, que es algo que no hacía. Quiero salir de acá con la mejor experiencia de vida”, agregó.
En la misma conversación, valoró la relevancia de contar contarlo. “Mi papá, que tiene 80 años, va a la farmacia y me compra mi medicamento, que es una pastilla al día y que salva la vida”.
“Si ellos tienen esa capacidad de entenderlo, asumirlo y asimilarlo, hay muchas familias que tienen que tener esa posibilidad. Quien no abraza a la persona que tiene ese resultado, lo deja morir”, manifestó.
Gala Caldirola y testimonio de vivir con un padre portador de VIH
Gala entonces tomó la palabra y dio su testimonio, como hija de un portador de VIH.
“Mi papá tuvo problemas con adicción a la heroína, y se contrajo con VIH. Desde pequeña aprendí a convivir con esa enfermedad”, partió señalando.
En esa misma línea, contó que “pasó por todas las etapas, por el sida, el VIH y ahora está en la etapa del retrovirus”.
Finalmente, precisó que “por eso, quiero compartir la experiencia de lo que es convivir con alguien que tiene esa enfermedad, y decirles que le saquen un poco el estigma y el miedo a esa enfermedad”.
“No pasa nada, uno sigue el tratamiento, uno se cuida, y la vida es igual para todos”, sostuvo la española, y cerró con un afectuoso abrazo a Caniulef.