Tras su estreno, The Marvels se convirtió en un gran fracaso para Disney, generando enormes pérdidas económicas.

La película es el peor estreno de la historia de la franquicia, que suma ya 15 años y decenas de proyectos. Y la recepción de crítica y público también ha sido negativa.

En ese contexto, Bob Iger, presidente de Disney, señaló cuál es el motivo de esta estrepitosa caída.

El ejecutivo acudió al evento The New York Times’ DealBook Summit. En él, reconoció que el filme no ha funcionado como debería y apunta la causa a la fase de producción. “The Marvels se rodó durante el COVID“, partió explicando.

“No hubo tanta supervisión en el set, por así decirlo, donde tenemos ejecutivos que supervisan lo que se hace día tras día”, añadió el máximo mandatario de La Casa del Ratón.

Presidente de Disney y estrepitoso fracaso de The Marvels

Con estas palabras, Iger achaca los problemas de The Marvels a una falta de control creativo durante la confección de la película.

En todos los proyectos del UCM, Kevin Feige acostumbra a tener todo un equipo de ejecutivos observando y gestionando los rodajes.

Algunos de ellos son los productores Louis D’Esposito, Stephen Broussard o Nate Moore. El presidente de Marvel siempre trata de mantener estable y coherente la narrativa central, el tono y la calidad de la franquicia. Algo que, debido al COVID-19, no pudo llevarse a cabo de manera tan exhaustiva en The Marvels.

En cualquier caso, las declaraciones de Iger han sido vistas por muchos fans como un ataque frontal a la directora de la película, Nia DaCosta. Y es que, en 2023, el filme no ha sido el único de Disney que no ha cumplido las expectativas. A la lista se suman cintas como Ant-Man y la Avispa: Quantumanía o Indiana Jones y el llamado del destino, entre otras.

Sin embargo, los defensores de The Marvels puntualizan que nadie ha sugerido que los directores Peyton Reed o James Mangold hubieran necesitado mayor supervisión para poder tener éxito.

Sea cual sea el motivo, lo cierto es que la última entrega del UCM está sufriendo mucho en la taquilla, donde tras casi tres semanas aún no alcanza los 200 millones de dólares, cuando su presupuesto fue de 270 millones.