Un reportaje de la periodista Laura Landaeta, revela el monopolio que existiría en el Festival de Viña, y las prácticas irregulares en su organización.
“Por años hemos callado, pero ya es tiempo de que se sepa la verdad”, señala uno de los más importantes productores de la industria de la entretención chilena, en el artículo del medio Interferencia.
El productor, que prefirió no revelar su nombre por temor a posibles represalias laborales, aseguró que el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, actualmente, está cooptado por un duopolio conformado por Bizarro y tradicionales ejecutivos de TVN.
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“Es tanto el descaro de Bizarro, que este año en los contratos del festival incorporaron una cláusula que estipulaba que cada artista que se presente en Viña, queda representado por ellos durante todo el año”, relata uno de los productores de la competencia.
Según evidencia el reportaje de Landaeta, se trata de una práctica irregular, debido a que la mayoría de los cantantes trabaja siempre con el mismo productor quien, a pesar de no tener un contrato de exclusividad, crea vínculos de confianza con sus representados.
Sin embargo, si un músico quiere presentarse en la Quinta Vergara, está obligado a hacer esa concesión a Bizarro.
De ese modo, hoy, esa productora (que pertenece a Peter Hiller y Alfredo Alonso) es quien decide qué poner y qué no en la parrilla del Festival de Viña. “Algo que dista bastante del espíritu que tradicionalmente tuvo el certamen”, plantea la periodista.
Por otra parte, el reportaje apunta a que en 2018, y luego de que Chilevisión gastara cerca de 12 millones de dólares en la producción del certamen, el gerente de ese canal y actual dueño de CNN, Jorge Carey, decidió entregar toda la producción del evento a Bizarro.
Lo anterior, con el propósito de no tener que negociar individualmente con todas las empresas involucradas en el festival.
De ese modo, Bizarro le ofreció a Chilevisión bajar los costos de producir el certamen, de 12 millones a 9 millones de dólares, por lo que Jorge Carey aceptó.
La corrupción que existiría en el Festival de Viña
Cabe señalar que antes de 2019, salieron a la luz una serie de denuncias por falta de probidad de los organizadores del festival, las cuales iban desde sobreprecios por artistas, hasta negociaciones para ganar un cupo en la competencia internacional.
Dichos miembros de la organización siguen siendo ejecutivos de TVN, y teniendo en sus manos el destino del certamen viñamarino, junto a Bizarro.
“Los involucrados son gerentes y no mandos medios. Gerentes con toda la potestad de hacer y deshacer a destajo“, aseguró un exasesor de Viña.
“Ellos aún tienen cargos importantes y pueden definir el trabajo de la gente de televisión muy rápidamente. Por eso nadie quiere enfrentarlos. Pero es necesario que se investiguen los últimos 20 años de Viña para saber quién robó y quién no”, agregó otra fuente del reportaje.
“Viña hipotecó su alma al mejor postor”
En esa línea, aparece el relato de un productor que prefirió reservar su identidad: “Les ofrecí a Lionel Richie para el Festival y me dijeron que no, que no calentaba a nadie, que estaba viejo. Y para mi sorpresa, al año siguiente lo llevaron por el triple del valor que yo había pedido. Por supuesto, la gestión no la hice yo”.
“(En 2018) me pidieron que hiciera una cotización por el doble del valor de mi artista, obviamente, el costo extra era para ellos. Reclamamos mucho y creo que esa fue una de las razones por la cual finalmente deciden entregarle el festival a una sola productora“, agregó otra fuente.
“Viña hipotecó su alma al mejor postor, y lo hizo sin pensar en las consecuencias”, añadió uno de ellos. “El monopolio de Bizarro nos ha perjudicado, ellos manejan la agenda del año y, como si fuera poco, además nos quitan a los artistas”, sostuvo.
Cabe señalar que en marzo de 2024, la Municipalidad de Viña debe concesionar nuevamente el Festival, donde en la lista de oferentes, por ahora, solo figuran Mega y Bizarro.
