El pasado 19 de junio, Rafael Araneda anunció con una foto desde la clínica que debió someterse a una cirugía, donde le extirparon un pólipo, luego de asistir al médico por un simple dolor de garganta.
“Les cuento de mi ausencia en Enamorándonos USA y en Radio Pudahuel. Ya me venía sintiendo mal, y con un dolor fuera de lo común en mi garganta”, partió contando.
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“El doctor me manda al hospital para bajar la infección e hidratarme y aparece una sorpresa en uno de los exámenes: un pólipo que extirpar. Y ya… ayer al quirófano. Todo salió muy bien y he tenido los cuidados necesarios”, agregó.
Si bien ya recibió el alta médica hace algunos días, el animador continúa con su recuperación en silencio. No puede hablar, por lo que toda comunicación la realiza con gestos o mensajes.
En conversación con Las Últimas Noticias, el animador detalló cómo ha sido este proceso. “No pude hablar por una semana y después solo puedo hacerlo dos minutos por hora como promedio”, contó.
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“WhatsApp y señas, todo perfecto. Mandarse mensajes en la misma casa es curioso, impersonal, pero se trata de un rato no más. Para el resto debe ser más aburrido, porque ya no tengo cara de enfermo ni dolores”, agregó.
A quien más le costó entender la situación fue a su hijo menor, el pequeño Benjamín, de 4 años. “Al principio me gritaba o me hablaba en modo de susurro, no entendía por qué le hacía señas, pero ya nos coordinamos: le hablo muy bajito al oído y ya”, narró.
El programa del comunicador en Univisión entró en receso hasta agosto, periodo perfecto para continuar con su recuperación. Asimismo, quedará algunos días al margen de Cuéntamelo todo de Radio Pudahuel.
