La mañana de este lunes, el matinal Tu Día visitó a Angélica Castro para conversar con ella sobre el estado actual de su hija Laura, quien fue operada de urgencia la semana pasada, luego de recibir un balazo en medio de una encerrona con su padre.
En conversación con Emilio Sutherland, la modelo y comunicadora reiteró su agradecimiento por todos los mensajes de cariño y preocupación que recibió su familia durante horas cruciales.
“La verdad es que ella está enfocada en recuperarse, que es lo único que importa ahora. Con mucha fuerza y agradecida. Me emocionó que quisiera escribir algo en sus redes, porque para ella la gratitud es todo, y sabemos que esto fue un milagro, porque no había manera de que hubiera podido salvarse“, dijo visiblemente afectada.
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En ese contexto, Ángeles Araya quiso enviarle un mensaje desde el estudio, el que conmovió a quien fuera su reemplazante en la conducción del programa Aquí somos todos.
“Angélica querida, no puedo dejar pasar el minuto para abrazarte a la distancia y decirte lo mucho que te queremos, lo mucho que queremos a Cristián (De la Fuente) y a Laura, para qué decir”, comenzó señalando la conductora del matinal.
Empatía de madre
Por otro lado, Araya le dijo que “escucharte hablar es súper difícil también para nosotros. Una mujer llena de vitalidad, alegría y emociones… verte hoy día en la fortaleza y debilidad de mamá, es imposible quedar ajena a ese dolor“.
Por último, quiso mandarle “un abrazo grande y apretado, lleno de buena vibra y energía”.
“Gracias, Ángeles. Somos mamás y tenemos solo una hija, lo hemos hablado muchas veces”, respondió Angélica Castro con voz quebrada, dejando en evidencia ese nexo que las hacía empatizar.
“De verdad, por el único motivo que estoy aquí y hablo de este tema -y lo voy a seguir hablando- es porque somos miles las víctimas de encerronas”, explicó también la mujer.
“El haber tenido que ver a mi hija, lo que está pasando, este momento doloroso, injusto e inhumano… Hay una rabia y una sensacion en mí de frustracion, también como comunicadora. Me reclamo cuántas veces haber hablado de este tema”, añadió, pensando en las veces que agradeció que a compañeros cercanos no les hubiera pasado algo más grave tras ser asaltados.
“Basta de una vez por todas de utilizar un lenguaje equivocado. No son delincuentes ni ladrones, son asesinos“, concluyó.