Sorpresa causó entre los fanáticos de Game Of Thrones una de las escenas de su último capítulo, en donde tuvimos un lugar privilegiado de un encuentro sexual entre los personajes de Arya Stark y Gendry Baratheon.

Maisie Williams, que le da vida a Stark, se refirió a las críticas por el episodio, las que principalmente señalaron lo incómodo que fue verla desnuda y teniendo relaciones sexuales con un hombre -aparentemente- mucho mayor que ella.

Tanto revuelo causaron las imágenes, que HBO tuvo que salir a recordar -momentos antes del estreno del capítulo- que Arya ya era mayor de edad en la serie (a diferencia de su contra parte en los libros de George R.R. Martin).

Tras la discusión que se generó en redes sociales por las acciones de su personaje, Maisie confesó a través de su cuenta de Twitter que para ella la experiencia fue mucho más traumática: “Si se sienten incómodos, sólo sepan que mi mamá, mi padrastro, mis dos hermanas y mis cuatro hermanos probablemente ya lo vieron también. Jajajá, mátenme”, señaló la actriz.

A pesar de las opiniones cruzadas que generó la escena de Williams en el último capítulo de la serie, una cosa es segura: Arya no tenía intenciones de morir virgen y ante la gran batalla, simplemente aprovechó su oportunidad.