Otra tensa jornada de eliminación se vivió este domingo en MasterChef, donde se dio a conocer el nombre del nuevo aspirante que quedó en el camino, en la búsqueda del ganador o ganadora de la cuarta temporada.
Luego de una competencia de salvación, en donde los concursantes debían preparar sus platos en base a distintos tipos de quesos. Aquí fueron Aníbal, Giovanni y Bárbara, los que lograron superar la prueba. El resto de los participantes tuvo que pasar a la fase final, donde debieron cocinar con la clásica mezcla de ‘mar y tierra’.
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Dos de los aspirantes que más sufrieron fueron Lautaro y Jeffry. El primero, no logró convencer al jurado, y se ganó un reto de parte ellos. Sobre todo de Fernanda Fuentes, quien le advirtió que “o deja de jugar al carrusel, o se va de MasterChef”
Luego fue el turno de Jeffry, quien reconoció que no estaba en su mejor día. Su plato que incluía filete y mariscos, acompañados con una porción de arroz. Este fue su punto más débil, ya que según explicó Jorge Rausch, estaba crudo, y a esta altura de la competencia es error era fatal.
Annabella también tuvo que pasar adelante como uno de los peores platos. Su preparación griega, si bien tenía un buen sabor, tenía un terrible fallo: la proteína estaba cruda. De hecho, el jurado ni siquiera se tomó el tiempo el probarla, ya que se veía totalmente roja.
Al final, Chris, Jorge y Fernanda tomaron su decisión y optaron por eliminar a Annabella, a quien no le perdonaron su error con el pato: “Qué pena”, fue su reacción, al enterarse de que debía dejar para siempre las cocinas de MasterChef. Además, Fernanda Fuentes reaccionó con lágrimas la partida de la aspirante.
