Este viernes, TVN transmitió la segunda jornada de la Fiesta de la Independencia de Talca, que en esta oportunidad contó con la presentación de Amar Azul, más los shows de Jordan y de Radagast.
Después de más de una hora en el escenario, Amar Azul se despidió entre aplausos, sin embargo, las 150 mil personas que estaban presentes exigían que el grupo volviera. Ante la insistencia del público, Karen Doggenweiler y Cristián Sánchez le pidieron a la banda argentina que regresara.
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Fue aquí donde se vio a Miguel Angel D’Annibale, el vocalista del grupo, regresando a escena con lágrimas en los ojos. Lo que se dio a entender, es que la presentación y el número de asistentes lo emocionó al punto de hacerlo llorar: “Es terrible esto, no puedo hablar”.
De fondo se podía escuchar cómo las personas gritaban “ídolo”, mientras Miguel Ángel se tapaba la cara: “Es difícil llegar acá, y bueno se lo debo a Dios, él tiene la culpa. No lo podemos creer, en el 2000 vine solo, no me conocía nadie, no lo puedo creer”.
Tras interpretar una vez más Yo tomo vino y cerveza, la banda se retiró al backstage. Aquí el vocalista explicó el motivo de tanta emoción sobre el escenario.
“Fue lindo porque ver a la gente con tanto amor, ojalá todos los pibes puedan ver ese mar de gente. Se me vino todo encima, mi papá que no está, mi familia que está lejos, fue puro amor”, explicó Miguel Ángel.
Claro que todo tenía una explicación, ya que el líder de Amar Azul reconoció que nunca habían estado frente a tanta gente: “Estuvimos en La Pampilla hace como 8 años, pero eran como 70 mil y 80 mil personas, pero esto es una locura”, concluyó.
