En el ojo del huracán se encuentra el alcalde de Conchalí, René de la Vega, quien es acusado de por trabajadores, concejales y vecinos, de despidos injustificados, hostigamiento laboral y encubrimiento de un colaborador sindicado como responsable de acoso sexual.

En este contexto, la panelista de Bienvenidos, Raquel Argandoña, reveló que su gestión como alcaldesa de Pelarco entre los años 2000 y 2004 no fue tarea fácil, y tuvo que tomar ciertas medidas para poder “mejorar” la convivencia con el concejo. “Al principio muchos concejales me decían ‘no, no, no’ y no podía avanzar”, recordó en el programa.

Es por ello que Argandoña admitió que entregó algunos “incentivos” que le permitieron realizar algunos de sus proyectos. “A veces tú dices ‘les voy a dar celulares o unos regalitos que están permitidos”, admitió, agregando que “Así tú vas manteniendo una buena relación y dejas esa idea que tienen de ti, que ibas a llegar a ‘echar’ gente”

Sin embargo, aclaró que esto no era una práctica frecuente y que no se trataba de coimas. “Obviamente no quiero decir que se compren los concejales, (pero) uno como alcalde debe tener buena relación con los concejales porque son los que votan por puntos importantes en las sesiones”, explicó.

Los televidentes no se hicieron esperar y comentaron respecto a dicha situación, y llamándoles la atención que nadie del panel manifestó algo al respecto.