Leandro Penna se convirtió en el flamante ganador del reality Doble Tentación junto a su pareja Lisandra Silva, tras lo cual los eventos discotequeros no le han faltado.

Pero el argentino se tiene confianza y cree que es capaz de mucho más, tal como señaló él mismo al diario La Cuarta. “Soy un chico reality, pero mucha gente no conoce una faceta mía, ya que solamente me han visto hacer televisión en los encierros”.

Y es que el trasandino espera que le den una oportunidad laboral donde pueda desarrollar una faceta diferente. “Creo que pronto me darán la posibilidad para que la gente pueda conocer otro lado mío. Como coanimador de un programa de entretención o divertido“.

A lo anterior además agrega, “me gustaría tener mi propio programa. Que sea para toda la familia, que lo pueda ver desde un nene hasta una señora grande. Algo dinámico, donde la gente se olvide del problema cotidiano y se someta a pura diversión”.

Sobre su participación en un próximo reality el argentino aclara que aceptaría una nueva oferta siempre y cuando no sea como concursante. “Creo que en el próximo debería ser el entrenador, el coach o el preparador físico. Hacer un reality es vivir la experiencia, entender cómo se hace tele. Yo veía a Karol (Lucero), las distintas animadoras y uno va aprendiendo”.

A lo anterior agrega que “cuando a uno le gusta la tele y si puedo tener mi propio espacio, ya sé cómo se maneja la tensión, el suspenso, lo que piensa cada uno, porque lo he vivido”.

Incluso hace una crítica contra la poca actividad física al interior de los encierros, señalando lo siguiente: “Creo que ya llegó el momento de decir ‘ché, hay que poner un coach’. No puede ser que todos entren con 40 kilos y se vayan con 70”, indicó entre risas.

El próximo reality debería tener un entrenamiento militar, yo fui uniformado y los levantaría a las 7 de la mañana“, añadió.

Sobre algunos percances que ha tenido en los eventos donde desata la euforia femenina, aclara que el es el único culpable ya que asume que le gusta compartir con todos. “Yo soy el que se mete en la boca del lobo”.