Piratas del Caribe: La venganza de Salazar, la quinta película de la saga de Disney protagonizada por Johnny Depp, se estrenó en nuestro país el pasado 25 de mayo.
A pesar de la buena recepción del público, actualmente el filme se encuentra en el centro de la polémica, luego de que la actriz protagonista de la historia, revelara insólitos detalles del rodaje.
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Se trata de Kaya Scodelario, quien dejó al descubierto un hecho que ha sido catalogado como maltrato animal por la organización PETA (Personas por el Trato Ético de los Animales). En una entrevista con el medio británico The Sun, la joven señaló cómo fue trabajar con un mono.
“El integrante más memorable del elenco fue el mono, porque vomitaba todo el tiempo… Tenía un estómago muy pequeño y cuando estábamos rodando en el barco vomitaba en medio de las escenas, era muy gracioso”, señaló la actriz a modo de anécdota.
Las declaraciones de Kaya provocaron preocupación en la organización animalista. Posteriormente, la entidad publicó un comunicado emplazando a la compañía Disney, y a los encargados de producción de la cinta de piratas.
Los animalistas clasificaron estos hechos como “inaceptables” y declararon que “no hay forma humana de obligar a un animal a actuar en una película”.
Recordemos que esta no es la primera vez que la organización se enfrenta a la industria cinematográfica. A principios de este año, la entidad denunció a la producción de la cinta A Dog’s Purpose, tras revelarse el video de un perro siendo forzado a entrar al agua para la grabación de una escena.
