Uno de los casos más recordados que se vieron en Manos al fuego de Chilevisión, ocurrió hace dos años en su primera temporada cuando una coqueta Rocío cayó frente la seducción de un guapo modelo.
En aquel episodio fueron los amigos de su pololo quienes la llevaron para demostrar que no era de fiar. Luego de bailar bachata, realizar la pose del Titanic y besar al actor, el grupo de jóvenes demostraron lo que afirmaban, consignó BioBioChile.
En noviembre de 2013, cuando se emitió el capítulo, Roció era estudiante de Kinesiología de la Universidad de Chile, momento que comenzó a sufrir del ciberbullying que le recordaban lo ocurrido en el programa.
Lee también: Chica de “frases célebres” de “Manos al fuego” rompe el silencio: Sigue enfurecida con ex
En una entrevista al diario Las Últimas Noticias, Rocío Espinoza comentó su nueva vida y cómo ha logrado dejar atrás ese fantasma que la dejó soltera por mucho tiempo.
Actualmente la morena vive en Valparaíso donde estudia la carrera de Ingeniería Comercial en la Universidad Técnica Federico Santa María, y trabaja en un bar de la ciudad los fines de semana. Además mantiene una relación con un joven de 26 años.
“Estuve harto tiempo soltera. La persona que estuviera conmigo tenía que aceptar todo el tema (del programa). Eso es difícil porque los comentarios van y vienen, hay gente que se queda con la percepción del programa, mi pololo tiene familia y amigos, entonces es incómodo. No es menor estar con alguien que tiene una fama que no es buena”, reveló.
Si bien su novio la vio en Manos al fuego, conversó con él logrando tener una relación estable hasta la fecha. Yo no soy la madre Teresa, pero tampoco soy tan loca. En la vida soy muy piola”.
En el medio nacional afirmó que en su trabajo recibe ciertas miradas pero no la acosan como si lo hacen en las redes sociales. “En redes sociales tiene otro comportamiento, pero es difícil que te digan lo mismo a la cara”
“Me trataban de fácil, y hasta hoy me llegan mensajes. Muchos hombres habían engañado a sus pololas en el programa y habían pasado piola. Cuando una mujer lo hizo fue como ‘ohhhh!'”
Rocío mantiene una postura optimista de lo ocurrido hace dos años.“A la gente se le olvidan las cosas. El tiempo pasa”, sentenció.