Versión transformista de "La última cena" en los Juegos Olímpicos desató la polémica

Una recreación del famoso cuadro de La última cena en los Juegos Olímpicos de París desató la polémica en redes sociales.

El número formó parte de la ceremonia de inauguración del evento, en donde se ve a más de una decena de artistas de la comunidad LGBTQ+, imitando a la famosa obra.

Cada apóstol y Jesús, pintados por Leonardo Da Vinci, fueron representados por artistas del mundo del transformismo en el evento llevado a cabo en Francia.

Al parecer, algunos sectores más conservadores se vieron ofendidos por la representación, expresando su malestar con duros epítetos. Por esta parte, usuarios calificaron la performance como una "parodia".

Desde la otra vereda, internautas agradecieron la representatividad de la diversidad en el evento que fue visto por millones de personas en todo el mundo.

Junto a la recreación de la famosa pintura, también se mostró una performance protagonizada por Dionisio, en el que el dios griego aparece "servido" ante los comensales.

Hay que recordar que La última cena es un cuadro de Leonardo Da Vinci, que representa la comida que compartió Jesús junto a sus doce apóstoles antes de ser traicionado por Judas.

Esta obra, que se encuentra en Milán (Italia) y mide 880 centímetros de ancho y 460 centímetros de alto, fue declarada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1980.

Además de esta presentación, la inauguración de los Juegos Olímpicos estuvo marcada por otros llamativos números.

Uno de ellos, protagonizado por la banda de metal Gojira, el que comenzó con María Antonieta cantando con su cabeza decapitada y que también generó millones de comentarios.