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Kathy Orellana reveló en La Divina Comida la importancia de su hijo en su recuperación de la adicción al alcohol, que la llevó a alejarse dos años de él. La exintegrante de Rojo destacó que su hijo fue clave para renacer y aprender a respetarse, tras perder la dignidad. Confesó que su madre la separó temporalmente de su primogénito, Facundo, debido a su problema con las adicciones, pero ahora mantienen un fuerte vínculo. Facundo, quien pidió a Dios por la salud de su madre, se muestra orgulloso de su recuperación y Kathy no desea decepcionarlo.
Kathy Orellana habló del rol clave que tuvo su hijo para recuperarse de su adicción al alcohol, que llevó a que tuviera que alejarse por dos años de él.
Lo anterior, en medio de una sincera conversación en La Divina Comida, capítulo que se verá la noche de este sábado por las pantallas de Chilevisión, y a la que tuvo acceso Página 7.
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Allí, la exintegrante de Rojo afirmó que "yo en un minuto me morí. Me morí y mi hijo me salvó, mi hijo me dio la oportunidad de volver a vivir mi vida como mujer, como mamá, como artista".
"Mi hijo me enseñó a respetarme, porque yo perdí la dignidad, yo la perdí mal, pero no lo digo con pena, lo digo con caleta de orgullo, estas lágrimas son de empoderamiento, que si alguna mujer me escucha o si alguien está pasando por un problema, créanme que no es el final", planteó emocionada Kathy Orellana.
Kathy Orellana y la separación de su hijo
Sobre cómo enfrentó este proceso, la intérprete señaló que "a veces no entendemos y decimos por qué me pasan estas cosas a mí y no podemos entenderlo en el momento, pero créanme que cuando llega ese momento de comprensión, todo se neutraliza y todo queda en calma".
"Esa paz que me entrega el Facundo cuando yo lo despierto en la mañana, cuando lo voy a buscar al colegio, eso es impagable. No hay nada ni nadie que me haga cambiar esas cosas que tengo en mi vida".
De hecho, Kathy Orellana confesó que ella habló con su hijo de su problema con el alcohol "sin pelos en la lengua", pero trató de ser lo más sincera con él.
Lo anterior, pese a que su primogénito estaba al tanto de los problemas que atravesaba su madre con las adicciones.
"Al Facundo no tuvimos que decirle mucho, porque él lamentablemente tuvo que vivir mucho. De hecho, a mí me quitaron al Facundo en un minuto, estuve dos años alejada de mi hijo y yo no me podía acercar a mi hijo, tenía una medida cautelar", contó.
Dicha acción judicial la interpuso su madre, ya que sentía que Kathy Orellana "estaba muy perdida".
"Facundo me veía todos los días borracha, no llevaba al Facundo al colegio, mil y mil problemas, de lo que es la adicción al alcoholismo. Entonces mi mamá me lo quita, sin embargo, él pudo entender la enfermedad, pudo entender que no era porque yo quería", reflexionó.
Actualmente, la artista tiene un gran vínculo con el menor de edad, quien asegura que le pidió a Dios tener a su madre sana.
"Siempre me dice: 'Mamá, yo soy el niño más orgulloso de la vida, porque cuando yo creí en Dios, yo le pedí a él la mamá que tengo hoy en día'. Yo no puedo, ni quiero, ni tengo ganas de en ningún momento por ningún motivo, en ninguna circunstancia de quebrarle esa ilusión nuevamente", cerró.
