El 2004 es un año que probablemente Nicolás Massú nunca olvidará, y no solo por su doble triunfo en los Juegos Olímpicos de Atenas, sino que por su fugaz romance con Salma Hayek.
Con tan solo 23 años, el ahora extenista llamó la atención de la actriz de Hollywood, quien lo buscó para felicitarlo por su hazaña, lo que se transformó en una especial cercanía.
Si bien la relación de Massú con Hayek ocurrió en 2004, no fue hasta 2012 que el deportista habló por primera vez de ello en profundidad, entregando detalles de cómo se conocieron.
Nicolás Massú y Salma Hayek: un romance fugaz
En conversación con Julio César Rodríguez en el programa Síganme los buenos del Canal Vive, el tenista relató que no había querido referirse al tema porque sentía que sus cosas personales “no tengo por qué contárselas a la prensa”.
Acto seguido, aseguró que tras el triunfo de sus dos medallas de oro en Atenas 2004, “se me vino una locura muy grande, porque tenía que salir con guardias de seguridad a la calle, me llamaban de todos lados, y al final me empecé a esconder”.
“Un día estábamos jugando una Copa Davis contra Japón, y mi papá me dice que Salma Hayek me quería felicitar por mis medallas, y yo le dije: ‘¿Sabes qué? Para mí que esto es hueveo’, y le pedí que no me molestara”, recordó.
Sin embargo, la actriz insistió en conversar con el extenista, y accedió a tener su contacto, lo que generó una especial amistad entre ambos.
“Empecé a hablar con ella y yo me fui a jugar a Europa por seis semanas. Durante ese tiempo hablábamos todos los días, y yo siempre me preguntaba si era mentira, hasta que un día recibo una llamada desde Bahamas, y ahí llamé de vuelta y me di cuenta de que era ella, porque estaba grabando una película, After the Sunset“.