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La muerte de la joven nutricionista Carolina Ancán Molina en Chillán conmocionó a la comunidad local y redes sociales. Hallaron su cuerpo sin vida en un alojamiento de Chillán Viejo, sin indicios de intervención externa según la Fiscalía. Su funeral se realizó en Parque Chillán, con emotivos registros compartidos por la Funeraria Esmeralda, donde recibió una multitudinaria despedida. Amigos y colegas le dedicaron sentidos mensajes de despedida, destacando su luz y energía.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesLa muerte de la joven nutricionista de Chillán, Carolina Ancán Molina, de 27 años, provocó profundo impacto en la comunidad local y en redes sociales.
Recordemos que la joven profesional había sido reportada como desaparecida el pasado viernes, situación que mantuvo en alerta a su entorno.
No obstante, horas más tarde se confirmó la triste noticia: su cuerpo fue hallado sin vida al interior de un servicio de alojamiento en Chillán Viejo.
Según los primeros antecedentes entregados por la Fiscalía, no existían indicios de intervención de terceros en el deceso, reforzando la hipótesis de un hecho sin participación externa.
Carolina fue velada en la Capilla Santa Ana, ubicada en calle El Golf N°406, en Chillán, y su funeral se realizó en el Parque Chillán, donde familiares y cercanos le darán el último adiós.
La Funeraria Esmeralda, encargada del proceso, compartió emotivos registros en sus redes sociales, en torno al último adiós a Carolina Ancán.
En las fotos y videos se puede apreciar la llegada de la carroza con el féretro, en un completo silencio.
En tanto, se puede apreciar también cómo sus seres queridos trasladan el ataúd, donde recibió una multitudinaria despedida.
Recordemos que la nutricionista era querida en Chillán y prueba de ello son los comentarios que muchas personas le dejaron, al enterarse de su deceso.
“Carito bella, tu luz y la bonita energía que transmitías siempre será recordada por quienes te conocimos. Espero que tu alma encuentre la paz y puedas darle consuelo a tu familia”, escribió una amiga.
Otro colega le dedicó sentidas palabras: “No olvidaré que fuiste una de las primeras pacientes que me enseñó el verdadero compromiso profesional. Espero que allá arriba encuentres la paz, pequeña”.
“Siempre te recordaré con una sonrisa", cerraron.