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Como un milagro puede definirse la forma en que un alumno del Liceo Pedro Pablo Lemaitre, de solo 16 años, sobrevivió a un ataque escolar propinado por otro adolescente de 17 años (de iniciales C.A.L.).
El responsable es también estudiante, pero de otro establecimiento educacional, y le asestó una puñalada en la zona torácica a la víctima, ocasionándole una herida que comprometió su corazón.
Se conoció -según relato de testigos- que el enfrentamiento entre los jóvenes se habría registrado cerca de la intersección de Avenida Colón con calle Jorge Montt, en Punta Arenas. Al momento de salir a colación, el adolescente se encontró con su agresor.
Este último se dio a la fuga, mientras que el afectado, gravemente herido, regresó al liceo por sus propios medios, donde lo asistió personal del recinto.
El SAMU le brindó oportuna atención prehospitalaria con maniobras de reanimación, lo estabilizaron y trasladaron hasta el Hospital Clínico Regional.
Una vez allí, tal y como explicó el doctor Cristián Gallardo, cirujano de la Unidad de Urgencias del Hospital Clínico de Magallanes, el joven ingresó "con una herida en la zona torácica, nosotros lo llamamos técnicamente área cardíaca", con "compromiso de conciencia, casi inconsciente", y tras perder una gran cantidad de sangre fue derivado de inmediato a pabellón.
Durante la intervención de casi tres horas, se evidenció una "lesión penetrante en el corazón del ventrículo derecho", que suturaron de urgencia.
Luego de la intervención, el paciente quedó internado en la Unidad de Cuidados Intensivos. Su evolución durante las primeras 72 horas será crucial.
Cabe destacar que tanto el doctor Gallardo como el director subrogante del principal centro asistencial de la región, Marcelo Torres, valoraron la atención conjunta que permitió salvar la vida de este joven tras el brutal ataque escolar.
"Llegó en el momento justo, entre comillas, porque si hubiese tardado un poquito más, quizás no la estamos contando", destacó el médico, agregando que "esto es una cadena que tiene que funcionar, o sea, la rápida atención del SAMU, traslado rápido, atención en pabellón".
Posteriormente, familiares del menor agresor lo entregaron voluntariamente a Carabineros, y quedó a la espera de su control de detención durante la jornada del martes.
Desde Carabineros, el general Marco Alvarado confirmó que se dispuso un operativo investigativo con personal del OS-9, SIP y el Laboratorio de Criminalística para reunir los antecedentes y entregarlos al Ministerio Público, que encabeza la investigación del caso.
Finalmente, los padres del joven agredido, quienes trabajan en Cerro Sombrero, se trasladaron en un helicóptero de Carabineros hasta Punta Arenas para acompañar a su hijo.
En tanto, amigos y compañeros del estudiante han iniciado cadenas de oración, mientras la comunidad educativa permanece en vilo por su recuperación.