Nico Ruiz y su ambicioso espectáculo 'Villa Navidad': "Es una experiencia completa para la familia"

Actualidad


Captura
La fiscal de la Corte de Apelaciones de Santiago, Clara Carrasco, ha suspendido a la jueza Irene Rodríguez por dejar en libertad al sicario Alberto Mejía, conocido como el "Rey de Meiggs". La liberación del detenido se debió a una autoidentificación falsa, errores de comunicación entre el Poder Judicial, Gendarmería y el Ejecutivo, y una orden de libertad mal interpretada. A pesar de posteriores correcciones, Mejía logró salir del país hacia Perú, siendo buscado actualmente por Interpol.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesEstas últimas horas, la fiscal de la Corte de Apelaciones de Santiago, Clara Carrasco, decidió suspender de sus funciones a la jueza Irene Rodríguez, tras dejar en libertad al sicario Alberto Mejía.
Carrasco, quien está a cargo del sumario disciplinario por los hechos acontecidos en el 8° Juzgado de Garantía de Santiago, tomó la decisión de suspender a Rodríguez este viernes, según información a la que tuvo acceso Radio Bío Bío.
El sumario a cargo de la persecutora fue instruido por la Corte de Apelaciones de Santiago el 15 de julio pasado.
Además de la jueza Irene Rodríguez, se anunció la suspensión de una funcionaria del Poder Judicial, cuyo nombre y cargo no han sido dados a conocer aún.
Una autoidentificación falsa, dardos cruzados entre el Poder Judicial, Gendarmería y el Ejecutivo y una orden de libertad, son algunos de los eslabones en la cadena de hechos que llevaron a la liberación del sicario de José Reyes, el denominado “Rey de Meiggs”.
El detenido se identificó como Osmar Alexander Ferrer Ramírez, lo que en un principio no pudo ser corroborado. Después, se confirmó que su nombre real es Alberto Carlos Mejía Hernández.
En el primer comunicado del 8° Juzgado de Garantía de Santiago a Gendarmería, en el cual se indicaba su ingreso a prisión preventiva, el nombre del imputado presentó un supuesto error de tipeo.
Tras lo anterior, se emitieron otros dos oficios: uno revocando la medida cautelar y ordenando su libertad, y el siguiente ordenando su ingreso con el nombre corregido. Pese a contar con este último comunicado, Gendarmería igualmente lo dejó en libertad.
Lo último que se supo del imputado es que pagó un viaje de más de 2 millones y medio de pesos desde Estación Central hacia Iquique, y luego salió del país hacia Perú. La Interpol emitió una alerta roja para su captura.
Hasta el momento, el individuo sigue prófugo.