Trabajadora sexual acusada por crimen de empresario niega el homicidio: “No hay ninguna huella mía”
Monserrat Valdivia y Lissete Núñez, conocidas como las “Escorts del Casino”, son dos trabajadoras sexuales que fueron condenadas a fines de 2024 por el crimen de un empresario en Viña del Mar.
En 2023 el empresario de 60 años murió por asfixia mecánica, estrangulación y sofocación. Horas antes de su deceso, el hombre salió desde el Casino Enjoy de Viña del Mar con las dos mujeres.
En conversación con Reportajes T13, Monserrat Valdivia negó el crimen.
Trabajadora sexual culpable por homicidio de empresario en Viña del Mar
Al hablar sobre la muerte del empresario, Valdivia aseguró que no lo mataron.
“Él estaba atrás y estaba ebrio, yo le dije que me tenía que ir, tenía que quedarme con mi hija. Ahí nos fuimos (con Lissete)”, dijo Valdivia. Sin embargo, 30 horas más tarde, el hombre fue encontrado muerto en su camioneta.
La justicia determinó que las trabajadoras sexuales lo golpearon en el rostro y las piernas, y lo asfixiaron al estrangularlo con una bufanda.
“Yo no tengo idea de los peritajes, yo soy una simple mujer que trabajaba como dama de compañía. Yo estoy dando mi testimonio, porque estoy presa porque me condenaron culpable, pero yo estoy mal condenada”, argumentó la escort.
Declaró que “él no estaba mal, no estaba muerto, él estaba ebrio. Nosotras nos fuimos, pero él estaba vivo dentro de la camioneta. No hay ninguna huella mía ni siquiera de Lissete Núñez en su cuello. Yo no maté a nadie“.
“Si yo lo hubiera matado, yo lo hubiera dicho, no le hubiera hecho este daño a mi familia de gastar todo este dinero en mí”, agregó.
El caso ocurrió el 23 de septiembre de 2023, cuando el hombre fue captado al interior del casino, compartiendo junto a las acusadas.
Luego, salieron del recinto y cuando la víctima pagó el estacionamiento, Monserrat logró ver su clave y la anotó en su celular.
Posteriormente, en un servicentro, se vuelve a ver la camioneta de la víctima, pero este ya no estaba al volante.
Días más tarde, el hijo de la víctima encontró el auto abandonado y, en el asiento trasero, a su padre tendido boca abajo, muerto.
El subprefecto Flavio Espinoza, jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI, afirmó que al tardar en encontrar un motel, el fármaco usado para drogarlo dejó de tener efecto y las mujeres lo ahorcaron con la bufanda que usaba.
Otras víctimas
Lo único que reconoció Valdivia fue un robo a un cliente que no habría pagado los servicios que había solicitado. “Yo reconocí el delito del iPhone, yo sí me lo llevé”, dijo.
Con respecto a las auto transferencias millonarias, Valdivia mencionó que “no hubo un fraude electrónico”.
“Él me hizo las transferencias, ellos pueden decir muchas cosas”, agregó.
Sin embargo, el Tribunal declaró que ella defraudó con más de 5 millones de pesos a uno de los denunciantes, la mujer obtuvo sus claves bancarias para transferirse dinero mientras él estaba dormido.
