Polémica en el Vaticano: cardenal condenado busca entrar al cónclave que elegirá a sucesor del papa

La situación del cardenal italiano Angelo Becciu genera incertidumbre de cara al próximo cónclave en el Vaticano, que elegirá al sucesor del papa Francisco.

El religioso fue condenado a 5 años y 6 meses de prisión por su implicación en un escándalo de irregularidades financieras, lo que llevó al pontífice a retirarle sus privilegios.

A pesar de que el Vaticano lo considera como "cardenal no elector" en sus estadísticas oficiales —aunque aún no cumple los 80 años—, su participación en el cónclave sigue siendo una interrogante.

Según la oficina de prensa, todos los cardenales pueden asistir a las congregaciones generales, las reuniones previas, "pero otra cosa es entrar en el cónclave".

La controversia se remonta a 2020, cuando el papa Francisco decidió suspender a Becciu tras revelarse su involucramiento en operaciones financieras poco transparentes.

En ese entonces, se le retiraron los derechos asociados al cardenalato, aunque no se le despojó de sus deberes eclesiásticos, entre los que se encuentra la elección de un nuevo pontífice.

"El papa reconoció mis prerrogativas cardenalicias como intactas, ya que no hubo voluntad explícita de excluirme del cónclave ni petición de mi renuncia explícita por escrito", afirmó Becciu este martes al diario Unione Sarda.

Durante el juicio, el cardenal también fue condenado a inhabilitación "perpetua" para ejercer cargos en la Santa Sede.

El caso salió a la luz tras la compra de un costoso edificio en Sloane Avenue, Londres, una antigua sede de las galerías Harrods.

Además, se revelaron otras operaciones sospechosas, como una donación de 125.000 euros a una asociación relacionada con Cáritas de Ozieri, presidida por uno de sus hermanos.