Chofer de Uber contradice a Fiscalía sobre estado de segunda denunciante de Jorge Valdivia

En el marco de la investigación de la Fiscalía Metropolitana Oriente en contra de Jorge Valdivia, se dio a conocer la declaración de un testigo considerado clave para la defensa.

Se trata del conductor de aplicación que trasladó a la segunda denunciante del exfutbolista desde el departamento del "Mago", a eso de las 6:20 horas del 18 de octubre pasado.

Respecto a este hecho, hay registros donde se ve al exjugador de la Roja, su hermano Claudio, otros dos hombres y dos mujeres en la discoteca Candelaria, ubicada en Vitacura, hasta cerca de las 4 de la madrugada.

Desde ahí se trasladaron hasta el departamento de Valdivia, ubicado en Las Condes, donde estuvieron dos horas y media. Luego, se marcharon en taxi.

En ese contexto, Mega reveló anoche un registro en el que se puede ver que las dos mujeres salen del inmueble a eso de las 6:20 horas.

Respecto a las imágenes, el fiscal Rodrigo Celis comentó que "si bien la víctima parece caminar bien, se ve que se da la vuelta y dice algo que solo se entiende un balbuceo. Eso nos da cuenta del estado en que estaba al momento de salir".

"Y refuerza la idea de que si está saliendo en ese estado, cómo estaba 40 minutos antes, quizás una hora antes, que entendemos es cuando se habría producido la interacción sexual no consentida o donde la víctima estaba incapacitada para oponerse", agregó.

La declaración del chofer de Uber que contradice a Fiscalía

La declaración del chofer de Uber, de iniciales J.V.L., pone en entredicho la versión de Fiscalía sobre el estado de la denunciante.

El trabajador confirmó que recibió la solicitud de viaje a eso de las 6:20 horas del viernes 18 de octubre. Según sus palabras, no se percató de un caminar tambaleante de las mujeres, consignó La Tercera.

"Me estacioné frente al edificio, esperé alrededor de 3 minutos, donde se subieron dos mujeres jóvenes, a las cuales yo puedo señalar que venían al parecer desde una fiesta, pero venían normal, no noté nada raro. Lo que sí puedo señalar, que sentí olor a alcohol, no puedo asegurar si ambas venían con olor, ya que las dos se sentaron en el asiento trasero, y solo me llegó un olor a alcohol liviano", dijo.

"Las chicas en ningún momento se quedaron dormidas, o presentaron algún signo de que estuvieran afectadas por alguna situación, ya que lo recordaría. Tampoco me comentaron nada a mí, de hecho, creo que no conversamos en el camino", indicó.

Por último, señaló que "ambas personas se bajaron en la dirección final que habrían solicitado en Uber, y recuerdo que ambas iban caminando normal, sin tambaleos, no notando algún signo de que estuvieran en estado de ebriedad notorio".