La hermana menor de Narumi, Kurumi Kurosaki, hizo una desgarradora declaración este martes, en medio del juicio contra el chileno Nicolás Zepeda, acusado como responsable de su muerte.

Según informó Meganoticias, la joven se presentó ante el Tribunal de Vesoul, Francia, donde habló sobre cómo afectó la desaparición de la estudiante a su familia, considerando que, además, su cuerpo no ha sido encontrado.

El crudo relato de la hermana de Narumi

“Si estoy aquí delante de ustedes es para describir a mi hermana mayor, Narumi, a quien admiraba, y para describir lo importante que fue esta persona en mi vida. Al mismo tiempo, describiré el profundo dolor que hemos sentido desde su muerte”, comenzó explicando.

Y continuó: “Quería ser como ella, ella era un modelo a seguir para mí. Era una perfeccionista hasta el final, cada vez que me decían que me parecía a mi hermana, me sentía orgullosa de ello”.

“Un día llegando del liceo me dijeron que mi hermana Narumi no estaba, que no lograban dar con ella. Honami (hermana menor) me dijo que ya no podíamos encontrar a nuestra hermana mayor. Me quedé allí, sin entender nada”, expresó dolida.

Posteriormente, Kurumi comentó entre lágrimas que “poco después, nuestra madre llegó a casa. Lo recuerdo como si fuera ayer… mi madre había perdido el control. Recuerdo esta escena en la que mi madre, que era tan fuerte, tan enérgica, se desplomó llorando”.

“Repitió el nombre de Narumi no sé cuántas veces. Fue esta escena la que me convenció de la terrible realidad. Con mi hermana tratábamos de ser fuertes. Era la condición para que nuestra madre sobreviviera”, lamentó.

Asimismo, la hermana menor de la desaparecida precisó que se sintió culpable por continuar con su vida, “mientras mi familia estaba en una angustia indescriptible, pero recordé las palabras de aliento de mi hermana mayor, ella quería que siguiera este camino. Seguí yendo a la escuela todos los días para no decepcionarla”.

Por otra parte, la joven manifestó sentirse culpable por lo sucedido y lanzó: “Yo debí haber muerto en lugar de ella. Tengo un enorme remordimiento en mi vida, el día que Narumi se fue a Francia estaba muy estresada por mis exámenes y me peleé con ella y no me pude despedir”.

Finalmente, Kurumi precisó que su único deseo es encontrar a Narumi para pedirle perdón, para luego dirigirse directamente a Zepeda y suplicar: “Le pido al acusado que nos diga dónde está mi hermana”.

Acto seguido, el presidente del tribunal le exigió al imputador: “Si usted sabe algo para disminuir el dolor de la persona aquí presente, dígalo por favor”. “No sé dónde está”, respondió el chileno.